Estás meando fuera de tiesto, y lo sabes.
Una cosa es que actos terribles de delincuencia sean promovidos o aprovechados como partícipe a título lucrativo por un Estado, con su soberanía, legitimidad, aparato administrativo y demás, y otra que los miembros integrantes de la organización criminal sean de una determinada etnia, agrupación socio-cultural, nación, o comunidad lingüística.
Alemania (Estado) fue directamente responsable criminal de los desaguisados de la "solución final". Los "alemanes" fueron tan víctimas como verdugos. Los alemanes del Danubio, de Transilvania, de los Cárpatos, del Volga, creo que ni les corresponde la responsabilidad, ni han emitido ninguna disculpa. Y sobre la participación activa (incluso entusiasta) en la "solución final", por repartir responsabilidades creo que entre lituanos (incluido instituciones públicas) o polacos (idem) hubieron alegres entusiastas, entre otros.
Entre los integrantes de la banda criminal hubieron gallegos (el sanguinario Caride Simón, responsable del mayor atentado de ETA, precisamente en mi ciudad), o catalanes "charnegos" (Monteagudo, responsable de la bestialidad de Vic, incluido el asesinato de cuatro niñas).
Ni los gallegos, ni los catalanes, ni siquiera la comunidad "charnega" de Catalunya, deben disculparse por nada de eso.
En el caso de ETA, si analizamos los hechos con un cierta frialdad, e intentamos buscar, siquiera a título indirecto a algún Estado (ente soberano dotado de legitimidad y potestades legislativas plenas, reconocido como tal por sus iguales), que o promoviese, o tolerase o fuese partícipe a título lucrativo de tal criminalidad ("Cui bono", "Cui prodest"), quizás a quienes encontrariamos es a una República llena de "grandeur", o a un Reyno "patria indivisible".
la plus belle des ruses du Diable est de vous persuader qu'il n'existe pas!