ADICAE vive, fundamentalmente, de aportaciones ajenas a sus asociados. Para los gobiernos, la existencia de asociaciones de consumidores es una pieza clave para fomentar la competitividad y combatir la inflación. Por eso las subvenciona. Pero ADICAE --y otros-- tienen que "ganarse el jornal", tienen que demostrar que ese dinero no va a saco roto; en definitiva, tienen que HACER CONTINUAMENTE ACTOS DE VISIBILIDAD SOCIAL. De ahí su superactivismo: publicaciones, ruedas de prensa, manifestaciones en la calle, etc. Hasta ahí vamos bien, pero... Buscad, sin más, en Google "ADICAE + preferentes + denuncia + demanda + querella", u otra entrada parecida, y veréis, veréis la maestría de estos señores conjugando el futuro de indicativo: "presentará", "denunciará", "está preparando", "se querellará". Si alguna vez usa el presente ("ha denunciado"), ojo, no se refiere a un acto judicial, sino a una denuncia pública. Que no muerden, vaya. En la última charla online del Sr. Pardos, echa balones fuera a una pregunta lapidaria ("¿Por qué, después de dos años, Vds. no han presentado, en sede judicial, ni una sola querella?"). La respuesta de Pardos es patética: "tenemos experiencia en estas cosas, que son muy largas, es mejor agotar las vías de conciliación, hay que preparar bien la cosa, etc. etc". Lamentable.
¿Os acordáis de un tal Ralph Nader, que optó a la presidencia de USA? Se hizo millonario al detectar fallos de seguridad en automóviles. Y ganó porque IBA EN SERIO, y se querelló contra la todopoderosa General Motors.
¿ADICAE y el Sr. Pardos van en serio?
Perquè la pasta se li està fent ja agra.