Decir que las preferentes son un producto de riesgo y perpetuo es objetivo. Que con el canje desaparece la perpetuidad del producto, sí, pero también se incrementa el capital de calidad de las entidades, ¿cual era el fin principal del canje, lo primero o lo segundo?
Calificar como justo el canje es pura subjetividad.
Es cierto, hay que asumir los riesgos, pero también hay que informar de ellos a quienes los asumen. No creo que la política comercial de las entidades haya cumplido con esa OBLIGACIÓN normativa, más bien se ha basado en el lema: "vende esto ya, no importa la forma"
También es cierto, las cosas no funcionan así .......,¿cómo iban a funcionar de otra manera? Si como empresa tienes que subsistir al precio que sea, ¿qué importan los clientes?, si no hay empresa no hay clientes y ...... "Sta. Rita, Rita, lo que se da no se quita", ¿verdad?
"La CNMV hace oídos sordos.....", depende de cada caso, yo conozco algunos en los que no han hecho oídos sordos y han emitido informes favorables al reclamante, eso sí, dichos informes se basan (necesariamente) en criterios objetivos, en documentos y prueba que acredite suficientemente la comisión de una infracción.
Lo que es criticable sin excepción alguna, en relación con su función de regulación y control, es que esta función ha sido descafeinada e ineficaz. Sus recomendaciones a las entidades en 2009 y 2010 no tuvieron la energía suficiente para pararle los pies a las entidades financieras y a sus tropelías en este negocio y su alcance fue, conscientemente limitado. Si hubiesen tomado, con seriedad, cartas en el asunto, quizás el panorama fuese distinto.