Tu sentido filosófico lo entiendo, pero te equivocas en lo de que el cliente no es de nadie, si yo meto la pata con un cliente, y le perjudico en su patrimonio o en sus intereses, este me puede demandar, ¿si no es cliente mío porque me demanda?, también entiende tu mi sentido, si mi cliente no confía en mi para preservar su patrimonio y sus intereses, mejor que encuentra a otro del que si se fie, pero lo que no tendrá nunca sentido es fiarse de varios mediadores para esa preservación de su patrimonio y de sus intereses, con alguna excepción de ciertas contrataciones puntuales muy específicas.
Todas las aseguradoras tienen oficinas con empleados para la atención de sus clientes, pero no para la contratación de productos, estas oficinas están también compartidas con agentes que no tienen oficina propia, y cuando un cliente entra en una de estas, le remiten a uno de los mediadores de esa oficina, eso es lo normal, también se está produciendo, por parte de las aseguradoras, un cierre continuo de este tipo de oficinas y se están abriendo cada vez más oficinas de mediadores.