El camino es a menudo más importante que el destino. Hoy quiero compartir con ustedes una curiosidad con la que me encontré en el curso de un análisis de datos rutinario.
Primero, déjenme exponer el contexto. En el balance de toda empresa podemos ver el patrimonio neto de ésta (en inglés equity). El patrimonio neto no es más que el reflejo del dinero que en su día pusieron los accionistas, a los que se van sumando conceptos como los beneficios retenidos. Si esto le suena a chino le remito al vídeo que hicimos este año: “Fundamentales desde cero: el balance.”
Bueno, lo anterior es lo más habitual, pero a menudo también podemos ver aminorado el patrimonio neto. Si por ejemplo el dividendo es superior al beneficio generado, el patrimonio neto caerá. Si la empresa genera pérdidas o si recompra acciones también.
Pues bien, empiezo mostrando el gráfico que llamó mi atención. Si hubiésemos decidido invertir en las empresas con equity negativo del S&P 500, nos habría ido muy bien.
Un diferencial de casi un 10% anual, no está mal...
Lo cierto es que no hay muchos casos con patrimonio neto negativo, pero cada vez hay más, por lo que quizás sea algo digno de análisis.
Cuando veo algo así, y tratándose además de pocos casos, intento replicar si ocurre lo mismo en otra zona geográfica. Pues bien, si hago el mismo ejercicio en Europa los datos son bastante distintos:
¿Qué puede ser que justifique esa diferencia? Mirando los nombres de un lado y de otro, parece que definitivamente no es el mismo perfil de empresa. Cuando uno mira la lista de empresas con equity negativo en USA, no parece el típico grupo conflictivo de empresas en pérdidas. (Datos de empresas disponibles a cierre de 2018)
Si el patrimonio neto no ha bajado debido a las pérdidas, ¿a qué puede deberse? La popularidad de las recompras de acciones ha ido en aumento, ¿será esta la causa de la diferencia?
Parece que, aunque seguramente no sea el único factor, sin duda ha sido clave. Las empresas americanas con patrimonio neto negativo recompran sus acciones, mientras que en Europa el grupo es más heterogéneo, y en agregado más bien vemos el fenómeno opuesto.
La asignación de capital de los gestores del negocio demuestra ser clave, una vez más, algo que en Madriu SICAV tenemos muy presente. Como decíamos, el camino es a menudo más importante que el destino: un patrimonio neto negativo nos da información, pero lo realmente transcendental es analizar el porqué.