Tratemos de comprender lo que sucede con la macroeconomía de España, para ver si el país va por buen rumbo, o tan sólo por un rumbo ideológico que no responde a las necesidades del país. La mayoría de la gente entiende la economía usando la microeconomía, un gran error que hizo que los estadounidenses no vieran venir la crisis. Por eso es preciso entender la macroeconomía.
Muchos suelen tratar de explicar todo como si fuera una economía de una familia, donde si no alcanza el dinero hay que apretarse el cinturón. Pero un país no funciona así, el gobierno no se rige por las mismas leyes. En una empresa lo importante suele ser cuidar los balances, pero igual, en un gobierno el balance no es lo único importante. De este modo, todas esas simplificaciones familiares o empresariales terminan dando visiones distorsionadas de la manera en que funciona una economía, algo muy conveniente cuando hay grupos de interés que quieren mantener la opacidad de la realidad para que el afectado y víctima apoye al victimario.
El marco teórico macroeconómico
Sabemos que el motor de la economía es el consumidor. Una empresa sin clientes no puede existir, algo que hasta el más neófito empresario sabe. Las personas, los ciudadanos (consumidores) compran y así las empresas reciben dinero. El dinero de los consumidores viene de los empleos.
El total de lo que los consumidores podrían comprar estaría dado por:
+ Ingresos del consumidor x Cantidad de consumidores
+ total deudas de consumidores
- pagos de deudas de consumidores
- monto ahorrado por consumidores durante el periodo
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= Tamaño económico del mercado
Resulta evidente que para un empresario es más ventajoso tener un tamaño económico de mercado mayor que uno menor. Esto significa que si tienes cada vez más consumidores eso es muy bueno, y por eso la reducción de la pobreza es un imperativo económico para mejorar la condición de las empresas. La mejor manera de reducir la pobreza es aumentar el empleo. También será muy bueno que los consumidores ganen más, porque así comprarán más. Al aumentar el empleo la cantidad de desempleados baja, y resulta cada vez más dificil contratar a bajo precio, lo cual empuja los salarios hacia arriba, pero esos salarios altos son buenos para el empresario. Si se piensa en corto plazo parece bueno que se endeuden, pero en el largo plazo, como los pagos de deuda superan a lo que el consumidor pide prestado para comprar, en realidad al empresario a largo plazo no le conviene que haya deuda.
Si los consumidores tienen miedo y dejan de gastar, o si los consumidores tienen un hábito muy sólido de ahorro, el tamaño económico de mercado se reduce.
Los trabajadores pueden trabajar para gobierno, bancos o empresas productivas. Lo que pase con el empleo en cada uno de estos sectores afectará el tamaño económico del mercado. Como ese mercado existe dentro del país, se conoce como demanda interna. Y evidentemente cuando se exporta a clientes de otros países será demanda externa. Este diagrama nos muestra los flujos de dinero entre distintos sectores de la economía.
Frente a un panorama de país con déficit y deuda, hay tres posibilidades:
- No hacer nada, dejar que el déficit y la deuda crezcan. Puede terminar como Grecia e Italia, o puede terminar como Francia y Rusia durante la revolución francesa y la revolución bolchevique, o como Argentina en la crisis de 1989 donde la gente se moría de hambre en un país que produce carne y frutas.
- Reducir gasto público (suele denominarse "austeridad").
- Subir impuestos.
Cuando el déficit y la deuda crecen
Francia se había endeudado mucho debido a la guerra. La última guerra que financió fue la guerra de independencia de los EUA. El resultado fue que tras endeudarse el país, viene una crisis con desindustrialización, y un proceso inflacionario que terminó cuando una pieza de pan costaba el salario de un mes de un trabajador. Por aquel tiempo la adolescente de mundo Barbie, María Antonieta que no entendía las necesidades de la población, dijo "si no pueden comer pan, pues que coman pastelitos". Y quizás por su falta de tacto le cortaron la cabeza. No es díficil entender por qué los ciudadanos con hambre se habrían lanzado en pos de una revolución.
Rusia había tenido varias guerras expansionistas, con la deuda resultante. Encima de ello, el sector productivo nacional se vio relegado en el proceso (algo así como España hoy, que tiene una economía real que se está desmantelando) y el país se desindustrializó, y ello dio pie a la escasez en el mercado nacional, y con cada vez más dinero y menos bienes, empieza un proceso inflacionario que termina empujando a los ciudadanos hacia la revolución.
No puedo más que imaginar que por miedo a ello, Rajoy hoy parece portarse con un carácter algo represivo, según denuncian algunos. Imagino que Rajoy piensa que escondiendo un problema, o a punta de crear miedo (como en el pasado han hecho los dictadores) se soluciona todo. La historia reciente de España recuerda un poco la historia latinoamericana, cuando vino el chileno Pinochet a aplicar la doctrina neoliberal en Chile.
La autora de “La doctrina del Shock” – entre otros libros – reconoce la enorme riqueza creada en los años del gobierno militar del general Augusto Pinochet. Sin embargo, agrega qué ésta estuvo acompañada de una rápida desindustrialización, de un aumento del desempleo del mil por ciento, de corrupción y de una deuda externa tan severa que obligó a Pinochet, en 1982, a despedir a sus principales asesores friedmanianos.
Fuente: Chile y el cuento de los tres cerditos
Y la represión contra el 15M nos recuerda al argentino Leopoldo Galtieri, quien quiso crear un chivo expiatorio nacionalista al lanzar la ira de los argentinos contra Reino Unido de forma similar a como Rajoy lanza hoy la ira contra los argentinos. Galtieri se puso a perseguir adolescentes de su país, aunque por el momento parece un poco más suave, porque todavía no parece haber reportes de desaparecidos, sino simplemente represión contra el 15M.
Los aires de autoritarismo del Gobierno de Mariano Rajoy ya empiezan a notarse a medida que avanza la 'primavera caliente' que se espera ante sus recortes. Las medidas más represivas no están todavía aprobadas pero el ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, ya ha avisado hoy de que no va a permitir ni una sola acampada en la Puerta del Sol, como planea hacer el 15-M. En Extremadura se ha impedido hoy la entrada a representantes de la asociación estudiantil Alcampus con la excusa de que el presidente de la Cámara tenía "informes policiales" sobre ellos en los que se alertaba de que eran "violentos y provocadores de altercados".
Fuente: La represión sigue en aumento: informes policiales sobre estudiantes, amenazas al 15-M…
El presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy, evitó este martes pronunciarse sobre las brutales cargas policiales contra estudiantes en Valencia, escenario de manifestaciones por los recortes presupuestarios en la enseñanza pública. Interrogado en Londres sobre los violentos incidentes de los últimos días en esa ciudad española, Rajoy rehuyó las críticas hechas a su administración por la desproporcionada actuación de los agentes antidisturbios frente a las protestas de jóvenes inermes, reporta Prensa Latina.
Fuente: Rajoy rehúye críticas contra represión a estudiantes en España
España también tiene su gasto de guerra. Resulta que si metes dinero en la sanidad, puedes ver si el dinero hizo efecto o no, pero en lo militar las ineficiencias no se vislumbran, porque para saber si un gasto militar era equivocado sólo hace falta tener una derrota, y últimamente el concepto de derrota se ha relativizado, dejando a sus anchas a los mercaderes de la muerte para que hagan negocios con un dinero público cuya eficiencia no la puede medir el ciudadano de a pie, pero uno puede sospechar que el gasto es innecesario e ineficiente, porque realmente no vislumbro a Francia ni a Portugal queriendo invadir a España.
El recorte de gasto público
Cuando se recorta gasto público puede haber o recorte de salarios o recorte de empleos. En ambos casos reduce el tamaño económico del mercado para las empresas y eso afecta las ventas de las empresas. Si hay recorte de empleos habrá consumidores que pasan a las filas de los desempleados. Como a las empresas no les gusta dejarse las pérdidas, transfieren la pérdida al trabajador, despidiéndole. Esto agrega desempleados procedentes del sector privado que se agregan a los del sector público, reduciendo el tamaño económico del mercado, lo cual empuja a otras empresas a despedir también, empeorando el problema. Los despedidos que tengan deudas no podrán pagarlas y podrían perderlo todo a manos de los bancos. Así cuando se dice que habrá recorte de gasto público, deberían advertir también a la gente que no se endeude, que cierre sus tarjetas y que no pida préstamos.
Cuando los consumidores empiezan a tener miedo al desempleo, empiezan a gastar menos, a ahorrar y eso reduce el tamaño económico de mercado. Las empresas tendrán que bajar los precios (deflación) para compensar y algunas no soportarán por mucho tiempo y quebrarán. El resultado final es la quiebra de empresas y mayor desempleo, y como los contribuyentes son empresas y personas, eso significa menos recaudación fiscal, menos ingresos para el gobierno, de modo que ante el intento de reducir gastos, se reducen los ingresos, y entonces el déficit puede ser aún mayor.
Y si el déficit es aún mayor, la deuda irá hacia arriba o habrá que cobrar más impuestos.
El barril sin fondo de los bancos
Sabemos que las personas o empresas que hagan tratos con el banco terminarán pagando más dinero del que recibieron de los bancos, de modo que el flujo neto de dinero va en dirección hacia el banco. Como los bancos hacen apuestas bursátiles arriesgadas con el dinero de los ahorrantes, que por supuesto crea incobrables que terminan llamandose "activos tóxicos" (¿Qué son activos tóxicos y qué es un rescate a los bancos?) que el gobierno termina subsidiando con dinero de los contribuyentes.
Al final el flujo neto de dinero en la economía va hacia los bancos y toda la economía se llena de problemas de liquidez, mientras que los banqueros siguen haciendo de los bancos un agujero sin fondo, que es como darle el dinero faltante a un banco apostador compulsivo para cubrir sus deudas, bajo la excusa de que necesitas del apostador para que la economía no se vaya a pique. Lo mejor sería separar banca de depósitos y banca de inversión, porque así al banco de depósitos le interesa mantenerse solvente y supervisará el destino que se hace en el banco de inversión, en lugar de que el banco de inversión apueste sin que los ahorrantes españoles puedan auditar nada de sus bancos.
Evidentemente los bancos que se benefician de la crisis no quieren dejar de recibir el dinero al que ya se acostumbraron. Con la victoria de Rajoy se esperaba que los mercados (los adinerados que controlan los precios) redujeran la prima de riesgo de España, pero no contentos con todo lo que le han quitado a España, le han subido la prima de riesgo, porque deben pensar que no están ganando lo suficiente. Parece que la actitud sumisa y servil, como la que han tenido los políticos españoles, no sirve frente a los mercados para apaciguar su avaricia.
Sector externo, ¿solución?
Al adentrarse España en cifras macroeconómicas como las experimentadas por el tercer mundo, se empieza a tener ideas que conducen a los mismos experimentos económicos realizados por países del tercer mundo. ¿Puede el sector externo (por medio de la exportación) ser una respuesta? En primer lugar el mundo sufre una crisis donde China ve que crecer exportando ya no es una solución.
La situación económica china es monitorizada por los analistas prácticamente en tiempo real, ante evidencias que sugieren deterioro estructural y por tanto incapacidad para seguir actuando de motor de la economía global. El índice chino de actividad PMI viene mostrando debilidad económica al no haber conseguido sobrepasar la crítica cifra de 50 en los últimos seis meses. De esta evolución se infiere que China se encuentra en fase de contracción económica desde hace medio año.
Fuente: Economía china en contracción, atrae al inversor bursátil
En Latinoamérica el modelo/experimento para aprovechar el sector externo se llamó "promoción de exportaciones". Lo aprendido indica que las exportaciones per se no son la respuesta, porque en sí mismos no traen un esquema de distribución de la riqueza.
Reforma Económica y Modelo de Promoción de Exportaciones: logros y vacíos de la política de desarrollo de las últimas dos décadas
La mayor dificultad de la economía costarricense es que el modelo prevaleciente, aparte de los problemas estructurales que ha acarreado, se ha concentrado prioritariamente en el crecimiento. Se requiere de una estrategia paralela que permita que los frutos obtenidos se distribuyan de una forma más equitativa. Para ello es necesario el reconocimiento de que los beneficios sociales no se derivan en forma espontánea del crecimiento económico y que, por consiguiente, se hace imprescindible la activa participación del Estado en la generación de los vínculos entre crecimiento económico y desarrollo humano.
Fuente: Pobreza: ¿Dónde estamos y cómo superarla?
Lo aprendido por Latinoamérica indica que al aumentar las exportaciones lo que se viene es una inflación, porque entra más dinero, y parte de la producción que normalmente iría para el mercado doméstico ahora va hacia el exterior. Entonces, al haber más dinero y menos producción para el mercado local, lo que hay es una inflación anual de dos dígitos. Recordemos que la inflación mina el poder adquisitivo de los consumidores del mercado interno.
Entonces sin un mercado externo que ofrezca crecimiento, sin mecanismos de distribución de riqueza que favorezcan al mercado interno, la exportación, no parece ser una opción viable a simple vista. Una mejor medida, implementada por China y Latinoamérica, ha sido aprovechar el hecho de que sus ciudadanos se volvieron baratos y pobres, gracias a la pérdida de poder adquisitivo que la inflación originada por la exportación trajo por años. España tiene una ventaja respecto de los demás países de Europa, y debería aprovecharla, pues los españoles son más baratos que los trabajadores del resto de Europa. Ninguna empresa es leal a un país, sino a los precios. El empresario deberá escoger entre el nacionalismo o los beneficios.
La ideología
Al final todo lo que ocurre en España es el resultado de una ideología predominante. En España los que tienen dinero piensan que es más importante ayudar a la empresa que ayudar al ciudadano, porque creen que ayudando a la oferta (empresa) y no a la demanda (consumidor) es como se genera empleo, pues aún tienen la ideología de que "a mayores utilidades de las empresas, más empleo se genera" que es la teoría que antes se conocía como "trickle down" o efecto cascada, según la cual los efectos de tener una empresa se traducía en empleo y bienestar para la gente, cuando en la práctica las empresas despiden (y no contratan) para obtener utilidades, lo cual implica que es una utilidad subsidiada por los empleados, y no una utilidad generada a partir del proceso de generar valor para un cliente.
El gobierno español primero le quita el empleo, luego los derechos laborales, y ahora la sanidad y la educación. Al final, la ideología parece apuntar a la idea de "Estado pequeño" que es el modelo que Somalia y Haití tienen. Es un Estado que no da servicios del todo al ciudadano, sólo al empresario y al pudiente.
Protestas en Madrid y otras 55 ciudades. Sectores sensibles de la población se movilizaron en contra del desempleo. Rajoy asegura que ‘no hay otra opción’ y que España necesita cambios estructurales. Decenas de miles de personas se manifestaron ayer en Madrid bajo la consigna “Con la educación y la salud no se juega”.
Fuente: España marchó para defender salud y educación
La ideología entre los adinerados dice que está bien especular, y algunos sienten que la especulación que se alimenta de la inestabilidad económica y la alimenta, tiene una "función social" lo cual hace sentir a los especuladores como aquellos que traen "eficiencia" y bienestar. Resulta que los bandazos inflacionarios generan pérdida de poder adquisitivo en el ciudadano de a pie, y los bandazos deflacionarios traen desempleo. Esta ideología fomenta los bandazos para el ciudadano de a pie.
La ideología también apunta a que el ciudadano común no participe en procesos políticos, ni como miembro de partido, ni como auditor ciudadano que sin participar en política tiene derecho a exigir al gobierno. Con tal de deshacerse del PSOE que es supuestamente de izquierda pero que funcionó como partido de ultraderecha, los españoles se han lanzado por el PP que es ultraderecha pura, de modo que lo esperable es que funcione como funcionó el gobierno Thatcherista que trajo el empleo a niveles que recordaban la crisis de 1930 en Reino Unido. La ideología española popular es tan de derecha (que no son sólo el PP y PSOE), que la idea de nacionalizar, como ocurre con el caso YPF, termina siendo rechazada por los españoles.
Si yo creyera profundamente que la danza de la lluvia hace llover, o creyera que cavando en el suelo voy a llegar a la Luna que está en el cielo, eso no hará que logre mi cometido, porque el mundo funciona como funciona y no es culpa del mundo que el mundo no funcione como dice la ideología. Realmente parece que la crisis de España es una crisis ideológica más que económica, una crisis de creencias. Realmente España no va a salir de la crisis mientras no replanteen sus creencias.
Para ello hay dos alternativas: Una es recapacitar a tiempo y corregir el rumbo, y la otra es tocar fondo, morder el polvo y empezar a cavar.