La respuesta es un rotundo “NO”; y las razones son varias y muy contundentes; la primera es que directamente quien entienda esto como una devaluación o que provoca los mismos efectos que una devaluación está completamente equivocado. En este sentido hoy toca una recopilación de post para tratar de explicar estas razones y el primer post que me gustaría recordar es aquel en el que MAFO se apuntaba a lo que se denominaba “devaluación competitiva”.
En ese post trataba de explicar que en definitiva, las devaluaciones surgen de la necesidad y con el fin de recuperar la demanda, y que tal circunstancia no penalice la competitividad de la economía, al mismo tiempo que se protege la demanda interna de las empresas. Ni uno sólo de los objetivos se da con las medidas que se han planteado, ya que no es lo mismo cargarse la demanda que tratar de proteger a las empresas nacionales usando un mercado nacional. Tampoco es lo mismo penalizar las ventas en el espacio nacional, que favorecer las ventas en el extranjero y por supuesto tampoco tiene sentido considerar igual cargarse la economía que garantizar la competitividad de la economía.
Por tanto, desde el punto conceptual, por mucho que nos cuenten que es similar, o que produce los mismos efectos, la realidad es que la realidad está demostrando que los efectos son completamente distintos y por supuesto por algo.
El hecho de que los efectos sean completamente distintos, también me ha dado pie a un par de post en el pasado. En concreto, en una serie sobre los resultados de la regresividad, ya he tratado de explicar y recopilar los datos, (en el segundo de los post) de las estructuras impositivas en España. Es muy sencillo entender que el camino de gravar a las rentas del trabajo y de sustituir impuestos directos, (o similares entendiendo como impuesto aportaciones para cubrir los gastos del estado) por impuestos indirectos que se reducen es un camino que ya se ha realizado. Evidentemente la situación actual es la conclusión de decisiones pasadas, de tal forma que en definitiva nos encontramos con que no se rectifica ningún aspecto en los dogmas de cómo cubrir el presupuesto, sino que se exageran. Es decir; bajar los impuestos que pagan las empresas de forma directa, mientras se incrementa el IVA es lo que se viene haciendo y no ha tenido los efectos que nos cuentan todos los que defienden estas medidas, sino que han tenido exactamente los contrarios.
Para entender porque nos encontramos en esta situación, uno de los primeros post de este blog, (allá por septiembre de 2009), trataba de explicar quién iba a pagar la subida de IVA que se adivinaba ya en aquella época, (aunque tardase cerca de un año en provocarse). La presentación no es la mejor, pero en realidad yo creo que en este post se explica perfectamente quien va a pagar la subida de IVA y es sencillo entender que en principio la van a pagar los consumidores en aquellos bienes de carácter básico en los que no nos podemos retirar, (bienes inelásticos) y resulta que como estos consumidores tienen un menor poder adquisitivo, y existen una serie de bienes que dependen mucho del precio, tendremos que pagarán el pato aquellas empresas que no puedan trasladarlo por no ser productos básicos o regulados. Por esto, lo pagarán los consumidores y los que dependan de estos, que básicamente son las empresas que están sufriendo las caídas de facturación.
Y para esto me gustaría proponer dos post adicionales que fueron la serie sobre el reparto del PIB entre trabajadores y empresas. Queda muy claro a la vista de los datos, que si hay algo que ha desequilibrado el sistema económico ha sido una trayectoria en un sentido determinado que ha dejado completamente destrozada la renta disponible de la inmensa mayoría de los trabajadores, que en síntesis son la mayoría de los consumidores en un sistema capitalista.
Esta medida va de forma exagerada en este sentido destrozando aún más la renta disponible y la confianza de los consumidores, de forma que la economía se sigue paralizando sin remedio. Por tanto esta medida lo que hace es incidir en las causas que han generado esta situación, tal y como he tratado de explicar en un post también muy antiguo en el que trataba de explicar que esta crisis es combinación de los salarios contenidos, de una especulación salvaje en todos los bienes básicos y de unas políticas monetarias demenciales. Y lo que es triste es que mientras se sigan profundizando en todas y cada una de las causas de esta situación, nadie puede esperar salir de este atolladero.