El 19 de mayo de 2010, Jose Luis Feito, presidente del IEE, de la asociación de concesionarias y presidente de la comisión de política económica y financiera de la CEOE entre otros cargos, se destapó con un artículo que tituló de forma muy clara: “España estaba quebrada el 7 mayo”. El artículo nos da toda una serie de datos y gráficas ilustrativas de la situación, destacando que los CDS de la banca española estaban por encima de los 300 puntos, que los inversores llegaron a rechazar rentabilidades del 18% o que la deuda de la banca con el bce estaba a nivel record.
En el artículo se hablaba del rumor del rescate que se preparaba para España de 280.000 millones de euros. La realidad es que el artículo es bueno y hay bastantes indicios para entender que algo grave había pasado, (o estuvo a punto de pasar). Sin embargo, parece increíble que una persona del curriculum y contactos como los de José Luis Feito, haya cometido un error tan claro a la hora de rematar, errando un disparo tan claro, después de todo el trabajo de datos propuestos.
Lo que estoy intentando decir es que España es algo que todo el mundo entiende como el estado español, pero el Señor Feito tenía que saber perfectamente que no era el estado español lo que estaba quebrado. Por supuesto, yo no tengo especialmente claro quien estaba quebrado en esa fecha, pero lo que está claro es que el estado español, no era el quebrado.
Vamos a ir un poco por partes; efectivamente el 6 de mayo hubo un crash en Wall Street, explicado mediante una explicación totalmente absurda de un error informático y aún hoy no explicado. Ese mismo día alguien intervino a toda prisa en Wall Street, para recuperar los índices en cuestión de minutos, y en medio del fregado sonó el rumor de que existían problemas en España. El domingo 9 de mayo de 2010, nos hemos encontrado con la intervención de emergencia del Ecofin, y el BCE con lo del fondo del billón, (con b de burrada) y la compra de bonos en el mercado secundario. Inmediatamente todos y cada uno de los países comenzaron a hacer los planes de ajuste salvajes, llevando la plana el de España que se parece sospechosamente al Griego.
Lo que está claro es que en esta semana hubo un problema que no ha salido a la luz, porque desde luego Europa no aprueba un fondo de un billón de euros un domingo y sin titubear, y desde luego el Banco Central Europeo, no entra a comprar deuda pública un domingo por la noche, si no existiesen razones de peso para tomar esta decisión.
Desde luego está claro que en Europa algo estaba a punto de caer, lo que nos queda es saber qué es lo que estaba cayendo. Asumiendo que el epicentro estaba en España, tenemos varias opciones, y puede ser que haya sido el gobierno de España el que estaba en peligro. Sin embargo, desde luego no hay constancia de que el tesoro público emitiese deuda en estos días, y menos aún que tuviese problemas para colocar una demanda de bonos. Por supuesto, el 18% estuvo muy lejos de cualquier tipo de deuda pública en cualquier momento.
Por otra parte, los CDS del estado, a pesar de estar en importes altos, no llegaron ni de lejos al nivel de los 300. En este sentido es muy difícil entender que existan indicios para defender que el gobierno de España tenía problemas tan inmediatos y graves.
Por otra parte, recordemos que si el estado era el que estaba quebrado, debería seguir estándolo, porque simple y llanamente, no ha percibido fondos, ni tan siquiera se ha visto beneficiado de un fondo que ni tan siquiera está demasiado claro que exista ahora mismo.
Dicho de otra forma, en caso de que el gobierno estuviese en quiebra, ¿Cómo se recuperó?. Recordemos que el gobierno de España no sólo no ha percibido un euro de fondos, sino que se ha comprometido a aportar una cantidad, (nadie sabe cuánto), para el fondo del billón.
Curiosamente Feito, nos da todos los datos, (y olvida unos cuantos), para la justificación de que España estaba en quiebra. Pero claro, resulta que son los bancos los que piden dinero al BCE, son los bancos los que tenían, (y tienen), los CDS disparados y son los bancos los que estaban intentando conseguir financiación. Son los bancos, los que estaban pendientes del BCE que no hizo nada el 6 de mayo, y fueron los bancos los que fueron rescatados por el plan de compra de deuda pública del BCE.
De hecho, el 10 y el 11 de mayo de 2010, ya puse en el post “Europa entra a saco a rescatar a los de siempre”, el proceso explicando el proceso por el que indirectamente todos rescatábamos (otra vez) a los bancos.
En definitiva, no es difícil entender que cuando se dice “España estaba quebrada”, en realidad debemos entender que nos está contando que alguna o algunas entidades de España estaban quebradas. Por supuesto, está claro que si queremos buscar las entidades quebradas tenemos que buscar en el sector financiero.
El caso es que el sector financiero de España está pelín tocado, y oficialmente lo que está peor son las cajas, o sea que podemos suponer que alguna caja tenía problemas graves en esa fecha. Supongo que será lo fácil, pero curiosamente, si exponemos que las cajas eran las que estaban a punta de quebrar en ese momento, nos plantea unas cuantas contradicciones.
La primera es que desde luego, las cajas no tienen la capacidad para tumbar Wall Street, ¿o sí?. Desde luego, los problemas de las cajas son evidentes, (al igual que los del resto del país), pero sin embargo, no parece demasiado plausible que problemas en alguna caja logren trascender y crear un crash.
Por supuesto, las cajas emiten deuda de forma conjunta y en cantidades muy modestas, debido a que tienen completamente cerradas las fuentes de financiación.
Otro detalle es que si los problemas fuesen de una entidad de un tamaño pequeño, la realidad es que el Banco de España hubiese intervenido la entidad que fuese. Desde luego, poco después se intervino CajaSur, pero desde luego, ese no es un problema inmediato.
Puede que fuesen los problemas de una caja de tamaño grande, pero el caso es que sigue sin explicar que no hay ninguna caja con un tamaño suficiente, y aparte, ninguna tiene presencia internacional, de forma que sería imposible entender que cayesen los mercados de Estados Unidos.
Por supuesto, queda otra gran contradicción que me lleva a pensar que realmente no ha sido una caja. Esta es mucho más sutil, y no es otra que la repetición machacona de que las cajas están mal. La realidad es que si hubiese sido una caja la que hubiese tenido problemas, lo hubiésemos sabido, porque la realidad es que nadie tiene problemas para sacar a la luz los problemas que estas entidades tienen.
Por supuesto, el rescate consistió, (como expliqué), en el rescate de las entidades inflando el valor del precio de los bonos de deuda pública, de forma que los rescatados tendrían que tener un volumen importante de deuda pública. De esta forma, el BCE si hubiese querido rescatar a países hubiese comprado deuda pública directamente a los estados, y si hubiese querido rescatar a las cajas, hubiese adquirido algún tipo de cédulas hipotecarias o activos relacionados con el mercado hipotecario.
De hecho, ese día se puso la puntilla a todos aquellas entidades que tengan problemas con el sector inmobiliario, (ya tocará en otro post).
Por tanto, la realidad es que si unimos todos estos indicios, lo más razonable es pensar que si existía alguna entidad en problemas inmediatos y urgentes en esos días esta tenía que tener las siguientes características:
- Ser una entidad con tamaño suficiente como para ser un problema para Wall Street y a su vez para obligar a intervenir a la UE y al BCE de madrugada.
- Ser una entidad con capacidad para esconder los problemas y distraer la visión de los problemas. Es decir, tiene que ser algo así como Lehman que fue capaz de esconder sus problemas al público hasta un par de días antes de su caída.
- Tiene que ser una entidad con exposición a la deuda pública, porque han sido los que han sido rescatados ese fin de semana.
- Los problemas tienen que venir de una entidad que tenga una gran exposición a la situación en los mercados financieros, que venían cayendo. Las cajas tienen una exposición elevada al mercado inmobiliario, que se cuantifican en 300.000 millones para el sector financiero global. Realmente eso no es nada comparado con la exposición a derivados y productos financieros, pero no en las cajas.
- Otro indicio importante es analizar las declaraciones y presiones que se han lanzado desde entonces y quien los ha lanzado. ¿Qué entidad está completamente desesperada por cumplir los términos del rescate?.
¿Algún candidato?. La verdad es que la duda es si es una entidad española, porque hay unas cuantas entidades que tienen este perfil, pero no demasiadas en Europa. En todo caso si ha sido “España” quien tenía los problemas, la realidad es que sólo se me ocurre una.
En todo caso, aún me quedan más indicios, que trataré de colocar en otro post.