Desde los inicios del blog me he empeñado en transmitir a los afectados por una venta judicial forzosa acerca de la inteligencia de vender la propiedad a toda leche para hacer suyos los beneficios que de otro modo obtendremos los subasteros cuando, una vez comprada y con las llaves en la mano, la pongamos a la venta.
Lo que hacemos los subasteros es especular y no hay ningún motivo por el que los demandados no puedan hacer lo mismo quedándose para sí el beneficio que de otro modo será para nosotros, los subasteros.
Y cuando eso no es posible por el motivo que sea, la siguiente mejor estrategia es fomentar que acudan a la subasta el mayor número posible de postores, que es exactamente lo que están intentando los del siguiente cartelito: