Hola. No es una respuesta directa a tu problema pero creo que puede aportar parcialmente a tus experiencias. Adjunto mi experiencia con el Servicio de Atención al Cliente y la atención al cliente en general. Soy cliente del Sabadell por haber estado con la Cam incluso cuento todavía era Abbey National, inicialmente en Madrid. Las relaciones con la oficina en Madrid (avda. Betanzos) siempre fueron fluidas, incluso después de mudarme a otra ciudad, sustituyendo visitas presenciales por el teléfono o el correo electrónico. Mi vinculación creo que es más o menos buena (hipoteca, Plan de Ahorro, Seguro hogar, acciones provenientes de las preferentes). Cuando el Sabadell adquirió la CAM y anunció (por escrito) que de todo lo que era gratis (algo que considero "derechos adquiridos") ahora iba a costar un buen pellizquín, intenté cambiar mi cuenta a una cuenta expansión, con mi oficina en Madrid. Al mismo tiempo tuve un problema con una tarketa de crédito que por no haber cambiado mi dirección la oficina, nunca llegó. Pues por alguna razón deconocida dejaron de atenderme en la oficina de Madrid. Pensé que a lo mejor era falta de tiempo, reducción de plantilla habitual en fusiones y adquisiciones y pedí el cambio de oficina a una oficina más cercana a mi actual residencia. Hice todos los trámites que me indicaron en la nueva oficina (abrir nueva cuenta igual etc. etc.) pero la oficina de Madrid desde entonces ha estado negándose a traspasar todas la operaciones y por ente pasarme a la nueva oficina. Intenté quejarme en Atención al Cliente Central por teléfono y me sugirieron enviar un escrito. Lo hice y recibí como contestación que era un tema comercial y que ellos no podían intervenir o ayudarme. Volví a intentarlo hablando con el director de la oficina en Madrid pero en ambas oficinas (Madrid y mi nueva residencia) me decían que no sabían qué pasaba, que el asunto incluso se había elevado a Dirección Comercial de Zona pero que no se resolvía. Es frustrante y la verdad es que crea una sensación de impotencia tremenda, pero al fin y al cabo pues es un banco privado, si quieres estás y si no, pues te vas al de al lado. El resultado es que entre unas cosas y otras no he cancelado todavía las cuentas por confiar que lo resolverían y en todo este tiempo entre la primera petición y ahora los gastos soportados entre mi cuenta y la de mi esposa ascienden a algo menos de 200,- euros.