Los ricos ni pagan, ni pagaran con la subida de impuestos.
Las entidades de banca privada españolas se han puesto manos a la obra para evitar el impacto que pueda tener el impuesto sobre las rentas altas que el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, anunciará durante las próximas semanas. Aunque todavía se desconoce el impacto de este nuevo tributo, los asesores patrimoniales barajan diferentes opciones con las que optimizar la fiscalidad de sus clientes.
La solución que los gestores de patrimonios ofrecen a sus clientes es llevarse el dinero a otros países comunitarios con una tributación más favorable, aprovechando la libertad de movimiento de capitales dentro de la UE. La opción principal es Luxemburgo, pero hay entidades que también piensan en Francia o Alemania.
Las principales posibilidades pasan por diversificar los activos de las rentas altas con productos financieros establecidos en Irlanda y Luxemburgo. Se trata de opciones de inversión que permitirían evitar un alza en los impuestos de Patrimonio, Sociedades, rentas de capital.
Si, como todo apunta, la subida de impuestos afecta a las sicavs, Luxemburgo es la mejor solución y los gestores especializados llevan meses trabajando en ese sentido.Los hay que han rescatado viejas gestoras que tenían inactivas en Luxemburgo y otros están llegando a acuerdos de colaboración con entidades extranjeras para poder llevarse las sicav a ese país.
Otra alternativa a Luxemburgo es directamente suprimir la sicav porque, si pierde las ventajas fiscales, a sus propietarios no les compensa el gasto de gestión y administración.
Hay quien cree que las medidas anunciadas por el Gobierno irán más bien por recuperar el Impuesto sobre el Patrimonio con un mínimo más alto que el antiguo (circula la teoría de un millón de euros, como en Francia), por una subida del tipo marginal del IRPF o por una nueva elevación del tipo sobre las rentas del capital. Sea como fuere, cualquiera de estas alternativas provocaría una huída de grandes patrimonios de España en busca de climas más cálidos para su dinero.
El mundo es como es y hay libertad de movimiento de capitales; si pones un impuesto del 25%, los grandes patrimonios se irán.
Con estas medidas, están en juego parte de los 325.000 millones de euros que gestiona la banca privada española. El anuncio de esta subida fiscal genera primero incertidumbre, y, en segundo lugar, búsqueda de alternativas.
El rojerío barato en manos de incompetentes dara votos pero no es bueno para el dinero porque el dinero no tiene color y va donde mas rinde y mas seguridad y tranquilidad hay.
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