Bien, de tus líneas deduzco que todo es relativo, como de hecho, lo es. Es una tontería por mi parte comparar los 3000 y pico de 1996 con los 6000 y otro pico del 2012, como lo es seguir pensando en pesetas para ver si algo es caro o barato. Llegué a ir al cine con 25 pesetas, si mal no recuerdo y mi abuelo con una sola llevaba a su novia a los toros y a cenar y todavía le sobraba para un par de cafés para el día siguiente.
¡Las comparaciones son odiosas! Tienes más razón que un santo, pero caigo siempre en lo mismo. Y creo que es un defecto muy común, si no, no estaríamos viendo en este foro a diario, personas que abren hilos para buscar un suelo mínimo del IBEX, comparándolo con otros suelos de su historia, intentando imaginar/adivinar a dónde llegará esta vez.
Me he pasado de pesimista muchas veces. "Yo soy yo y mis circunstancias" y en función de mi estado de salud y de ánimo, veo las cosas más o menos claras, el futuro de España gris en diferentes tonalidades desde claro hasta marengo, pero por ahora lo veo "joío, joío"... Ayer leí a un forero cómo preguntaba al viento si la crisis había terminado. ¿Acabar? ¡Alma cándida, si todavía no ha empezado!
Intentaré no dejarme llevar por mis impresiones, el corazón nunca fue buen amigo de la Bolsa, por algo los ladrones te preguntan: "¿La bolsa o la vida?" Si pones sentimientos en ella, te dejas la vida por el camino... y nada, ni todo el oro del mundo, merece una lágrima, un sufrimiento...
Pero como no soy de piedra de dólmen, sé que mis intenciones serán difíciles de llevar a cabo y no sé si podré siempre conseguir lo que hacen los expertos, controlar sus emociones a la hora de invertir y de ver cómo se van para abajo las velitas "colorás", cada vez más gordas...
Todo este rollo macabeo para expresarte que no prefiero comprar más caro, pero sí comprar más estable y por ahora, cualquier similitud bursátil a la estabilidad que añoro, es pura coincidencia.
Tendré que empezar a aprender a ser más escueta en mis "alocuciones", ;-) jejeje
Un saludo cordial y ¡feliz día!
Si un amigo es de verdad, su amistad perdura en el tiempo y con la distancia.