Josu Jon Imaz, consejero delegado de Repsol, cree que la burbuja que ha vivido el sector del petróleo en los últimos años, con un aluvión de nuevos proyectos de hidrocarburos no convencionales, como el fracking, que a su vez han llevado a un descenso de los precios del barril, terminará explotando.
“Estamos en una situación de sobreproducción con respecto a la demanda que el mundo necesita”, explicó en Sitges.
El consejero delegado de Repsol, que hace unas semanas asumió todos los poderes ejecutivos de la petrolera española, recordó que “una burbuja puede durar lo que se logre mantenerla en el tiempo, pero al final siempre acaba explotando”. En declaraciones a EXPANSIÓN, Imaz concretó que esa burbuja en los hidrocarburos no convencionales vino alimentada por un aluvión de financiación a esos proyectos. Muchos de ellos, están ahora en revisión, o, las empresas que los promocionaban, se han visto golpeadas en Bolsa, de lo cual se han beneficiado otras.
Por ejemplo la propia Repsol, que hace unas semanas completó la compra de Talisman por menos cantidad de dinero de la que se había fijado cuando se iniciaron las negociaciones. Imaz dijo que ni los bancos de inversión ni los analistas fueron capaces de prever hace un año que se iba a producir una caída del precio del petróleo como la que hemos vivido.
Josu Jon Imaz mencionó una anécdota. “El Congreso Mundial del Petróleo que se celebró en Madrid en 2008 tuvo unas jornadas específicas sobre hidrocarburos no convencionales, y ¿saben cuantas personas asistieron?, cinco”, explicó.
Desde entonces, afirmó, ha habido un cambio de paradigma, “a mediados de 2014, EEUU empezó a producir no convencionales en mayor medida que el crecimiento de la demanda”. Aunque aun “estamos en una situación de sobreproducción”.
fuente expansion