El conglomerado británico Rolls Royce obtuvo un beneficio neto de 1.229 millones de libras (1.424 millones de euros) en la primera mitad del año, por lo que escapa de los números rojos que cosechó en el mismo periodo del ejercicio previo, cuando registró unas pérdidas de 1.554 millones (1.800 millones de euros).
Según los resultados presentados este jueves por la compañía, la empresa aumentó sus ingresos en el semestre en operaciones continuadas en un 34%, hasta situarlos en los 7.523 millones de libras (8.717 millones de euros), y éstos vinieron principalmente de la división aeroespecial civil y defensa, que incrementaron sus ingresos subyacentes, respectivamente, en un 39% y un 18%.
"Los mejores resultados financieros han reflejado un crecimiento continuo del mercado, mejoras comerciales y eficiencias de costes", ha señalado el conglomerado en un comunicado.
La compañía ha destacado que el beneficio operativo en el semestre se triplicó con creces, hasta situarse en 797 millones de libras (923 millones de euros), respecto a los 223 millones (258 millones de euros) en los que quedó en la primera mitad de 2022.
El apartado financiero registró un beneficio neto de 621 millones de libras (719 millones de euros) de libras frente a las pérdidas de 2.054 millones (2.378 millones de euros) de la primera mitad del ejercicio pasado.
El flujo de caja libre, al igual que los beneficios, escapó de los números rojos y se situó en 356 millones de libras al cierre del semestre (412 millones de euros), según los resultados subyacentes.
Por otro lado, la deuda neta de la compañía se situó en la primera mitad de este año en 2.845 millones de libras (3.299 millones de euros), lo que supone una reducción del 12% respecto al dato de cierre de 2022.
Rolls Royce revisó al alza sus perspectivas el pasado 26 de julio y expresó que espera obtener en 2023 un beneficio operativo de entre 1.200 y 1.400 millones de libras (1.391-1.623 millones de euros), en tanto que el flujo de caja libre se situé en torno a los 900 y 1.000 millones de libras (1.043-1.159 millones de euros).
El consejero delegado de Rolls-Royce, Tufan Erginbilgic, ha señalado que el "programa de transformación a varios años vista ha comenzado bien, con un progreso ya evidente en nuestros sólidos resultados iniciales y una mayor orientación para todo el año para 2023 [...] A pesar de un entorno externo desafiante, en particular las limitaciones de la cadena de suministro, estamos comenzando a ver el impacto temprano de nuestra transformación en todos nuestros negocios".
"Tenemos una cartera sólida de productos y tecnologías en mercados finales en crecimiento y hemos obtenido contratos clave que crearán valor futuro y crecimiento rentable. Nuestra continua transformación hará crecer nuestro negocio y nos permitirá desempeñar un papel más importante en la transición energética", ha añadido.
Los títulos de Rolls Royce, que cotizan en el parqué de Londres, subían un 4,5% en el tramo medio de la negociación de este jueves, a 186,8 libras la acción (215 euros), si bien ya subieron con fuerza, un 21%, el pasado 26 de julio, cuando la compañía comunicó que esperaba mejorar sus cuentas respecto a lo que pronosticaban los analistas. En lo que va de año, la cotizada británica duplica su valor en bolsa