Los expertos desahucian al Aplidin de Pharmamar contra el Covid-19
Los analistas dan por hecho que el Aplidin de Pharmamar contra el Covid-19 se quedará en el camino. "El entorno de estos medicamentos ha cambiado"
Comentario.
A los fracasos de Noscira, Atlantis, Genómica y Pliti para Mieloma Múltiple, habría que añadir ahora el de la Pliti para el Covid. Recordando lo que pasó con Atlantis, Neptuno seguirá (al menos oficialmente) hasta diciembre de este año, que es su fecha de finalización. De no alcanzarse un número de pacientes razonable (por encima de 450) lo más probable es que se decida interrumpir el ensayo, fracaso que se taparía (i) con el supuesto éxito de la combinación Lurbi+Irino (NCT 02611024) que también finalizará en diciembre de este año y (ii) con la promesa de seguir con la Pliti para otros tipos de virus, (lo que sería el probable tercer fracaso de la Pliti, como no se aprenda a planificar los ensayos de otra manera).
Opino que Pharmamar hubiera progresado mucho mejor en el tema “Pliti” para el covid, si se hubiera asociado en 2020 con una “big pharma”. Seguro que en estos momentos ya se estaría comercializando, obviamente ingresando menos que yendo en solitario, pero es lo que siempre he dicho que más vale el 20% de “algo” que el 100% de nada, que es lo que se tiene actualmente con la Pliti.
No se puede seguir así. Por suerte parece ser que el futuro para el tratamiento de cáncer de pulmón microcitico estaría en la combinación quimio+inmuno. De hecho en estos momentos ya se están realizando ensayos de Lurbi+Atezo (Roche), Lurbi+Pembrolizumab (MSD), Lurbi+Durvalumab (AstraZeneca), Lurbi+Nivolumab (Bristol-Myers), Lurbi+Berzosertib (Merck), sin olvidarnos del Lurbi+Irino (Pfizer). Excepto este último, todos son productos inmunoterapéuticos de grandes farmacéuticas por lo que Pharmamar se verá obligada a pactar con ellas quiera o no por motivos puramente técnicos. Por ahí podría venir la salvación de Pharmamar. Se la obligaría a seguir una estrategia clara que ahora no la tiene por los bandazos o “palos de ciego” que va dando a nivel de ensayos. Revisando el histórico de fracasos y hablando en términos futbolisticos, Pharmamar no sabe a qué juega. Y esta necesidad de combinación “Lurbi+Inmuno”, encauzaría “algo” los dispersos esfuerzos que va realizando.
Las “grandes del sector”, pondrían en evidencia la necesidad de la existencia en Pharmamar de un CEO que fuese un gran estratega para señalar el camino a seguir. Sus grandes socios la obligarían a ello. Tiene que venir una “fuerza externa” que obligue a Pharmamar a cambiar al actual “ratio” de cuatro fracasos por un éxito. No puede ser que se necesite pasar por un calvario de cuatro reveses para alcanzar un solo triunfo. No puede ser que después de 38 años solo se haya logrado el "full approval" de un fármaco cuya patente ya ha caducado. Y por no hablar de las promesas incumplidas. Sousa ha demostrado que no sirve para ser CEO de una compañía de 1.000 M€. Es un autócrata ilustrado que sirve para investigar y mandar en una empresa familiar, pero cuando se crece y se ha de competir con otras compañías del sector mejor dirigidas, ahí le vienen los problemas de gestión. No sabe. ¿Pero quién se atreverá a decírselo?. Y es que es muy difícil poner el cascabel el gato sobre todo si el gato se llama Sousa y es el “zar” del chiringuito.