Por completar:
Desde que se dice que el interés que se paga por la deuda ha bajado hasta que lo reflejan las cuentas pasan en el mejor de los casos 6 meses y en el peor un año.
Me explico con un ejemplo, en noviembre de 2019 venció un bono de TEF de 1.750 millones de euros al 4,7% de interés pagadero anualmente (82 millones anuales de intereses) pues bien, si se hubiera lanzado una nueva emisión por el mismo importe y al 1,7% (30 millones anuales de interés) TEF presentaría en las cuentas anuales de 2019 que el coste de la deuda se ha rebajado en un X% y, sin embargo, el ahorro de 52 millones en intereses no se produciría hasta noviembre de 2020 que sería cuando se pagase el primer cupón de la nueva emisión.
Con esto quiero decir que la rebaja de deuda y del interés que se paga por ella es diferido (las vencimientos del 2019 afectarán a los intereses pagados en el 2020) y recurrente porque se consolida (mientras no suba el tipo de interés o decrezca tu necesidad de financiación).