Pues es sencillo, no lo hacen por dignidad, por luchar por lo suyo, puede desde fuera no entenderse, pero si alguien viene a tu casa y te echa de ella a patadas, tienes dos opciones o abrirle la puerta y callarte o liarte a ostias con el aunque sepas que vas a llevarte más. A eso se le llama luchar por lo tuyo y quién sabe si quizás el agresor se lo piense con otros en un futuro gracias a Ucrania.