BME: plataformas y cortos
Íñigo Villegui 18 diciembre 2015 / 05:00h
Las acciones de Bolsas y Mercados Españoles (BME), que cotizan en torno a 33,9 euros con una rentabilidad por dividendo del 5,56%, son un claro ejemplo de infravaloración.
Su cotización en el año sube únicamente un discreto 5,6%, pese a tratarse de una compañía con expectativas prometedoras y que ha demostrado su potencial de generar beneficios en los peores momentos de la crisis. Buena idea de las favorables previsiones que se barajan para la compañía las anticipó el pasado miércoles el presidente de BME, Antonio Zoido, quien estimó que las salidas a Bolsa entre los años 2015 y 2018 se dispararán más de un 200%.
En los últimos cuatro meses el saldo de posiciones cortas sobre Bolsas y Mercados Españoles ha duplicado su porcentaje que, según los registros de la CNMV, ha crecido desde suponer un 4,43% del capital social hasta un 8,94%. Un aumento que ha contribuido a presionar la cotización del holding de los mercados españoles, que en este periodo -entre el 7 de agosto y el 11 de diciembre- sufrió un retroceso del 15,9%, castigo que en los últimos cuatro días se ha moderado hasta suponer actualmente un 10,7%.
Entre los factores utilizados para justificar la escalada de posiciones bajistas, los inversores barajan diversos factores, desde temores a una ralentización económica que provoque nuevas caídas en los volúmenes contratados, hasta el futuro impacto que tendría la temida tasa Tobin, pasando por el creciente incremento de la competencia de las plataformas alternativas de contratación. Factor este último, que posiblemente sea el más importante, si bien los resultados de BME han seguido creciendo en los últimos tiempos, pese a que también lo ha hecho la cuota de mercado conjunta de las plataformas. El último informe de Fidessa, fechado el pasado 11 de diciembre, otorgaba a BME un share del 71,84%, frente al 28,16% que se repartían las plataformas (BATS Chi-X CXE, un 19,27%; Turquoise, el 5,70%; BATS Chi-X BXE, el 3,12% y Aquis un 0,08%). En los últimos tres meses, la cuota de mercado de BME ha descendido desde un 72,06% al 9 de septiembre hasta un 71,84% en la actualidad.
Una evolución íntimamente relacionada con los cambios advertidos en la estructura de clientes de muchas sociedades y agencias de valores, ya que decrece el peso de los inversores minoritarios y aumenta el de los inversores institucionales, lo que deja entrever la escalada experimentada en la competencia entre intermediarios, que ha impuesto la búsqueda, a toda costa, en nuevas áreas de actuación a fin de asegurarse abaratamientos en los servicios que ofertan, que les permitan mantener los resultados, sin perder cuota de mercado.
En cualquier caso, BME mantiene un share superior a los que registran en sus respectivos mercados, Deutsche Börse (58,14%), Bolsa de París (62,27%), London Stock Exchange (60,10%) o Bolsa de Milán (69,91%).
Los inversores parecen convencidos de que, si los títulos de BME logran vencer la actual zona de resitencia y se consolidan por encima de 34 euros, tendrán asegurado el retorno a la zona de 40 euros, cota en la que algunos inversores han puesto su objetivo. Otros a su vez consideran que éstos se han quedado cortos, pues prevén que a medida que la cotización se aproxime a la barrera de 40 euros se multiplicarán los cierres de posiciones cortas, lo que incrementará su avance.