Publicado el viernes 11 de marzo de 2011
DESDE EL PARQUET
El cambio de Sos
Iñigo Villegui.– La percepción de los inversores hacia Sos ha variado en los últimos meses. Tras haber despejado las incertidumbres financieras más acuciantes, sólo falta consolidar la situación actual y avanzar en un plan estratégico que reestructure sus negocios y logre mejorar los resultados. Unos objetivos que no parecen difíciles de alcanzar en estos momentos, pese a la situación general, pues sus productos son apreciados y cuentan con una buena distribución y cuotas de mercado interesantes. Además, su nuevo consejero delegado, Jaime Carbo, cuenta con un elevado prestigio en el sector e inspira confianza a diversos inversores institucionales.
Además, la entrada en su accionariado de Ebro Foods, con una participación del 9,33%, también ha contribuido a mejorar la imagen de la compañía. Sin embargo, pese al profundo cambio registrado por la sociedad, que ha culminado el proceso de recapitalización, habiendo conseguido además un acuerdo de refinanciación a seis años, así como enajenado la división arrocera y el Proyecto Tierra, sus acciones no cuentan aún con el atractivo necesario para atraer inversiones a corto plazo. No obstante, en trimestres venideros, una vez que los resultados reflejen las mejoras de márgenes que espera el mercado, la cotización podría despegar. En consecuencia, el valor actual de las acciones de Sos parece el adecuado y no habría que esperar revalorizaciones especiales. Sos Corporación Alimentaria opera en niveles próximos a los 0,665 euros, con un castigo acumulado del orden del 30%.