“La política ordinaria de las personas de todo el mundo que desconfían de su divisa, ha sido comprar y conservar oro. Esta actividad ha sido ilegal para los ciudadanos de Estados Unidos desde 1.935, por fortuna para ellos….. El tenedor de oro no ha recibido ningún tipo de renta por su capital y, al contrario, ha sufrido ciertos gastos anuales por el almacenamiento. ….. La prácticamente absoluta inutilidad del oro para proteger frente a una perdida del poder de compra del dinero..”. “El inversor inteligente” (1.949). Benjamín Graham. A ver, frente a los cantos de sirena, que siempre surgen en tiempos de tormenta (crisis), es sensato colocar la prudencia y el sentido común. El oro es inútil (salvo usos muy marginales en joyería y odontología). Es estéril (no aporta beneficio ni dividendo alguno). Es costoso de mantener (almacén, seguros, etc). Tras el abandono del patrón oro, dejó de ser dinero, con lo cual pasa a ser una mercancía metálica más, sujeta a las variaciones de precio del mercado, por la ley de la oferta y la demanda. Hay una evidente burbuja en fase de euforia en torno al oro, que cuando estalle (estallan todas), va a dejar unos daños catastróficos. No es apto para invertir a largo plazo, sino para especular (comprar y vender más caro). Los mercados de materias primas, son mercados rápidos, para profesionales, donde es muy fácil salir zurrado. El maestro Soros ya ha realizado ganancias, vendiendo todo su oro (el lema de la burbuja, es “que el último euro lo gane otro”, o “el último que apague las luces”. J.P. Morgan, decía que era como jugar a pasarse la cerilla (se quema el último). Warren Buffet, dice que, si un marciano viera como tratamos al oro, se rascaría la cabeza: sacado bajo tierra, hecho lingotes, y enterrado otra vez en cámaras subterráneas, con guardias de seguridad. Y la solución ¿Cuál es?. Te doy la mía: fondo de emergencia en dinero liquido para cubrir un año de tus necesidades vitales. La machaca la inflación pero es el precio que tenemos que pagar por vivir. El mayor error financiero que creo puede cometer alguien en este mundo, es no tener reservas liquidas significativas (cuando vienen mal dadas, pierdes todo). Y luego ser dueño de negocios solidos (ACCIONES), que te protegerán contra la inflación y te aportarán una rentabilidad (vía dividendo y plusvalías), y te permiten exención fiscal en el pago de dividendos (1.500 E), y tributación favorable al resto (19 a 21 %) frente a las rentas del trabajo que te sube hasta el 45 % (el mundo beneficia a lo financiero). Además difieres el pago del impuesto de plusvalías, si no vendes a largo plazo, y puedes obtener el beneficio de interés compuesto, reinvirtiendo los dividendos. Si quiebra el país, la moneda, el banco, tu sigues siendo dueño de tus acciones (el banco es un mero tenedor de las acciones, el dueño eres tu). Solo debes preocuparte de que no quiebre tu empresa (hay que coger lideres, a buen precio). Y para el metálico, no olvidar que tenemos en España a toda la banca europea (no hace falta salir del país para nada, yo hace muchos años que no trabajo con banca española) y alguna de Usa. Prácticamente ya se conoce los bancos europeos en mejor estado financiero para capear el temporal. ¿QUIEN DA MAS?. Te lo digo: NADIE. ¿Te gustaría estar en un bonito Bunker, refugiado de la crisis que viene en 2.012 en España, protegido de la inflación y del ansia recaudatoria de los políticos?. Pon acciones en tu vida. Si quieres oro, espera a que pete la burbuja que harás negocio. Y lee un poco a Graham, que vale más la prudencia que el dinero.
PD.- Y si con lo que te sobra quieres comprar algo de lo que te dicen por ahí, tu veras ( que solo se vive una vez, como dicen los no budistas). Yo compro monedas (algunas de oro), pero por ser numismático, no por inversión. Me gusta el metal y el atractivo místico que siempre ha tenido sobre los hombres. Pero su sitio es la caja expositora.