Creo recordar que estuvimos en Andrés Domingo, hablamos con unas chicas que estaban sentadas a sendas mesas y una de ellas llamó a un caballero, a quien expusimos nuestra idea. Como la vitrina quería y quiero que tenga más cristal que madera, inicialmente pensamos en una cristalería. Él me dijo que se podría hacer pero que no merecía mucho la pena hacerla en cristalero, porque nos iba a salir mucho más cara que en carpintero.
Total, que me desanimó a hacerla con ellos. De ahí que buscase a Cutillas, quien en principio, nos contó las mil y una noches, nos enseñó muebles, teóricamente hechos por él, una mesa de cristal que era una verdadera obra de arte, puertas con cristales emplomados, como comentas, preciosidades pomos de Swarovskil, y luego, meses de trato más tarde, a su mujer, granaína, simpática y habladora, se le escapó decirnos que la mesa que me encandiló desde el minuto cero, no había sido hecha en su taller. ¡Por poco me da algo!. La obra ya estaba encargada y en marcha. Señal dada.
Llega el mueble a casa y encuentro que uno de los listones, tenía los agujeros mal hechos, rellenados con masilla y vueltos a perforar a la altura adecuada. ¿¿Perdón?? ¿¿Me presenta esa porquería en un mueble nuevo, hecho a medida y para una colección como la que él conocía??
¡Ni de coña acepto esa chapuza, vamos!
Total, que les dije que se llevaran todo. En ese momento no podían y tuvieron que venir otro día, pero él me dijo que tenía que pagar a los carpinteros, agárrate que hay curva y que no me podía devolver la señal. Le respondí que ya veríamos lo que dictaminaba el juez y entonces se ablandó su corazón, pretendiéndome devolver unas migajas, en plan favor.
Me pareció tan feo su comportamiento que no quiero ni saber de él y por supuesto, a su carpintero no le quiero ver ni de lejos, vaya. Me da algo si viene a casa a presentarnos un presupuesto.
Por eso, he encontrado esta mañana al de Villena y he pensado que a tan lejos no iría Cutillas a buscar a su carpintero...
A ver si me puedes dar el teléfono o forma de contacto con tu amigo, por si conoce a alguien que pueda orientarme.
Un abrazo grandote
¡Sed muy felices!
Si un amigo es de verdad, su amistad perdura en el tiempo y con la distancia.