"Una empresa familiar mete en un bote de conserva toda una paella valenciana
Valencia, 17 nov (EFE).- Una empresa familiar ha condensado en un bote toda una paella que está lista en quince minutos y que ha sido especialmente diseñada y cocinada sin conservantes ni colorantes artificiales para quienes no dispongan del tiempo que requiere la paciente preparación de este plato mundialmente conocido.
La idea, que abrevia los habitualmente engorrosos trámites para la preparación de una paella, ha surgido en el seno de una firma radicada en la localidad valenciana y arrocera de Sollana, Paellas Aleña SL.
Roberto Sanchís, uno de los socios de la empresa, ha explicado a Efe que la idea surgió en sus viajes fuera de Valencia, cuando comprobaron que a muchos arroces les llamaban "paella valenciana" aunque "llevaban hasta aceitunas negras, que no están malas" pero no forman parte de la receta valenciana más internacional.
Este emprendedor defiende la paella como una comida sana que, gracias a su idea, se puede hacer de manera rápida y sencilla. "Estamos acostumbrados a la pizza, que sí, que es buena, pero una paella es una combinación de carne y verduras sanísima".
Según Sanchís, cocinar una paella cuesta una hora y media: "Ahora que todos estamos muy ocupados, se lo damos todo listo al consumidor, que solamente necesita echarle el arroz".
Esta paella se comercializa dentro de un bote con el arroz separado, de tal forma que sólo hay que calentar el sofrito -que lleva su preceptivo pollo, conejo y el romero que le da el toque típico valenciano- y añadir posteriormente el arroz para que cueza en unos quince minutos.
"Hemos preparado una conserva que es como una fabada, tiene dos años de caducidad y es toda natural", detalla Sanchís, quien confiesa a Efe que están contentos con el resultado obtenido "por el sabor que tiene, como la que hace tu madre", y por la aceptación que encuentra desde que comenzaron su comercialización, hace apenas tres meses.
Algo más de 80 kilos de pollo, 40 kilos de carne de conejo, 40 kilos de judía plana y otros tantos de judión ("garrofó" en valenciano) son los ingredientes con los que cocinan el contenido de 450 botes.
Enrique Domingo, otro de los socios de la empresa, destaca que "esto no es un congelado" sino una conserva: "No hay que añadir nada, sólo abrir el bote y verter el contenido, porque aquí dentro lo lleva todo, todos los ingredientes de la auténtica paella valenciana" y sin tener que trabajar mucho. EFE"
No es por dar la nota discordante, que quizá sí, pero llamarle "engorroso trámite" a preparar una paella, me suena un pelín exagerado, ¿no?
¡Que aproveche a quienes la compren!
Un saludo
¿Y dónde queda el encanto y aroma de unas brasas?
Si un amigo es de verdad, su amistad perdura en el tiempo y con la distancia.