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Hay que proponer a los Super Jefes Foriles un "Multimegusta".
Como ya os comenté en una ocasión, una compi de estudios, misionera en África, cuando vuelve por Navidad -como los anuncios de turrones- entra en los supermercados españoles y se le saltan las lágrimas.
Me encantaría que en este país, todos mis compatriotas padres de niños que ya perdieron la inocencia Mágica del día 6, convencieran a sus niños para que se quedaran sin alguno de sus detalles y ese dinero lo llevaran a un comedor social, por ejemplo. Y obviamente los que no sean padres lo mismo, se autoconvencieran que la solidaridad no solo es posible: ¡Es necesaria!
Un abrazo y ¡feliz finde!
Si un amigo es de verdad, su amistad perdura en el tiempo y con la distancia.