Que conste en acta que con 18 años me llamaron a filas y me presenté en el cuartel. Ya os conté la anécdota. ¡Lo que no me haya pasado a mi! Pero me rechazaron por estrecha de pecho, jajaaaaa ;-))))))
Se pierde capacidad, tiempo y a la larga dinero, ya que alguien bien preparado y dispuesto a realizar el trabajo cunde más. Es lógico. Lo malo es que hay ciertas actitudes poco lógicas.
Si es una culebrilla que se muerde la cola, el jefe pone poco interés en el trabajador y el currito le devuelve la misma moneda al empresario.
Ya os comenté alguna vez que me repatea y mucho cuando pregunto por una falda (me da igual qué negocio sea) y me contestan que tienen lo que está ahí, señalando con un dedo. Releñe, ¡¡ya me imagino que lo tienen colgando en la tienda y no tirado por el suelo en plena calle, lo que quiero es que me ahorres el tiempo de buscar una falda que igua ni tienes, que al fin y al cabo es tu trabajo y no el mío!! grrrr...
Todo es transitorio, todos somos mortales, hasta los papas, de acuerdo, pero chico, mientras dura vida y dulzura y cuando no esperanza nuestra. Si estás contratado, trabaja bien, cundirás y quizá suene la flauta por casualidad y te renueven... La menda trabajaba así. No me iba mal.
Para eso están las opiniones, para verterlas y quien quiera que ponga el cazo y las comparta. En este caso, creo que pienso similar, aunque hay excepciones a toda regla.
Un abrazo grandote
¡Sed felices!
Si un amigo es de verdad, su amistad perdura en el tiempo y con la distancia.