Pues ya es curioso que justo los más ociosos acostumbran a ser del club de los ricos. Y los más laboradores más bien no.
El cuento de la cigarra y la hormiga es muy bonito, pero es eso, un cuento.
En la realidad de las sociedades humanas, trabajar y riqueza no acostumbran a coincidir en las mismas personas. Quizás sí podría ser cierto que para lograr la riqueza de algunas (unas) personas, algunas (otras) personas deben trabajar.
Por otra parte: ¿Que es trabajar?
¿Producir cosas?
¿Los empleados no productores son trabajadores?
¿Ser retribuido por hacer algo?
¿Si lo haces, pero sin retribución es trabajo?
¿Solo es trabajo si hay un marco laboral?
¿Solo es trabajo si sus frutos son declarados?
¿Todo trabajo implica necesariamente una empresa?
¿El trabajo es tan buena cosa que hay que premiar dinerariamente a quien lo hace?
¿El trabajo es tan perjudicial que incluso hace falta pagar a alguien para que lo haga?
¿O quizás no es ni bueno ni malo, ni necesario ni sobrante, y por eso la dignidad salarial está en decadencia?
No se, a veces parece que nos ponemos a resolver el mundo desde la simpleza y los lugares comunes. Parece que pretendieramos escribir el "Libro de los Dogmas Revelados" a partir de titulares periodisticos y sloganes políticos.
la plus belle des ruses du Diable est de vous persuader qu'il n'existe pas!