como bien dices, una cosa es el despilfarro y otra un análisis utilidad/coste.
la utilidad del estado autonómico quedó bastante clara en el redactado e intencionalidad de la constitución, resolviendo el problema del encaje de distintas realidades nacionales en el estado democrático. esa es su utilidad.
el coste no tiene por que ser mucho mayor que el de un estado centralizado, similar al del año 1976 donde las diputaciones provinciales y los gobernadores civiles mantenían la ley y el orden, en un Estado tan arruinado como el actual.
2011 cerró con una deuda pública del 68,5%/PIB, 735.000 millones €. de ese total, las autonomías, representando un 60% del gasto público total, son responsables de 140.000 millones de deuda, 13,1%/PIB, y los ayuntamientos de 35.000 millones, 3,3%. Es por tanto la administración central es la responsable del 52,1%/PIB de la deuda, cuando el gasto público "centralizado" no llega ni al 35% del gasto público total.
en porcentaje sobre deuda total:
Administración Central: 76,2%
Comunidades Autónomas: 19%
Corporaciones Locales: 4,8%
está claro que es la administración central, representando menos de un 35% del gasto público total, el gran problema. y no nos engañemos, la realidad es que el fuerte incremento de la deuda pública se ha debido a las cuantiosas ayudas que se vienen prestando a la banca desde el inicio de la crisis y a los pagos por prestaciones de desempleo, casi 50.000 millones al año.
en el PP todo huele a rancio, huele a rancio en las comunidades por el pp gobernadas, con las mayores deudas, y huele a rancio en las cajas de ahorros peperas, con elevados rescates.
si quieren abrir el melón de nuevo con intenciones recentralizadoras y bajo el pretexto de la crisis, podemos vernos sumidos en una situación de consecuencias terribles. y los únicos responsables serán mariano y su panda, por mucho que después pretenda responsabilizar a los mercados, a merkel, a zapatero, al BCE, a .... a todos menos a sus decisiones, que ya sabemos que no tienen libertad para decidir nada, y por eso están dispuestos a acabar también con la de todos los demás españoles.
Detesto a las víctimas que respetan a sus verdugos.