Re: EURO, ¿no hay ningún otro camino?
No te enfades, hombre que ni estás estás metido en ningún lío ni yo estoy en contra tuya ni de nadie. Y tampoco te he pedido que te retractes de nada sino que meditaras mejor ese parrafito (“Se hizo un trato: ‘hasta ahora, políticos españoles, habéis vivido del oro de América… etc’) y si crees que debías rectificar que rectificases, que “rectificar es de sabios”, querido.
Y no se trata de haber leído más (que también), sino de las vivencias de cada uno y de la edad, los estudios y la profesión o profesiones que se tengan. En definitiva, de estar atento a la realidad para adquirir una “cultura general” que se obtiene de muchas formas, entre otras, como tú bien dices viajando (yo más que el baúl de la Piquer, por toda la Península, las Islas y el extranjero, con especial mención a tu tierra, la cual conozco muy bien y estoy harto de decir por aquí que la admiro, lo que me ha valido que me hayan dicho de todo.)
Y esas ciudades en medio de los campos españoles están sujetas por unos cimientos que excavaron en nuestra tierra hispana los romanos, los visigodos y sobre todos los árabes, a los que debemos gran parte de esa agricultura a la que tú haces referencia, la cual la dejó Franco y sus tropas arrasada por completo en la Guerra Civil. O sea, que mal se podía vivir de ella. Por eso y porque España siempre ha sido tierra de latifundios sin explotar (de eso se quejan Sánchez Gordillo y Diego Cañamero), de cotos de caza y fincas de señoritos que no invierten ni un duro. Esta es mi visión, grosso modo, de la historia reciente de España. y no quiero entrar en el siglo XIX, porque mientras en Europa se preocupaban de desarrollar la Revolución Industrial aquí las distintas oligarquías se dedicaban a dar golpes de estado y de ir de gerrita en guerrita, como las Guerras Carlistas.
Por otra parte, desde 1939 hasta el 59 en España se pasó mucha hambre (física). Y a partir de 1960, con el Plan de Estabilización de Don Laureano López Rodó y sus colegas del Opus se abrieron las fronteras y la cosa cambió, porque aquí no había ni jabón para lavarse.
Y el tema de nuestra incorporación a Europa no fue tan maquiavélico como tú lo planteas. Ya en tiempos de Franco, el Ministro de A. Exteriores, Alberto Ullastres (Opus) lo intentó en varias ocasiones y la condición que ponía Bruselas era que sí, pero cuando España fuera una democracia. Más tarde, en los años 70, antes de morir Franco, mientras que se hacían las coaliciones entre los demócratas preparando la Constitución y Felipe “se quitaba de encima” al antiguo socialista Llopis (los restos del exilio) y él tomaba el mando socialista español en el Congreso de Suresnes (cerca de París), su amigo el primer ministro socialista alemán Billy Brand (hablaban en francés) se encargó de dar los primeros pasos para la incorporación de España a la UE, que culminó con la firma del Tratado en 1985. Lo demás son leyendas urbanas.
Nosotros le veníamos muy bien a nuestros socios europeos para la Export-Import (por cierto, nuestra export agrícola actual, de maravilla) y ellos a nosotros, que mientras solo éramos “los 15” nos “regalaron” 140.000 Mill. de euros de los Fondos FEDER, los cuales fueron nuestra perdición porque nos creímos ricos y ese fue el detonante para que aquí se gastara sin miramientos (Aves, autovías, puertos y aeropuertos, calzadas, rodondas, polideportivos, farolas, parques y jardines, etc, etc.) Y sin guardar para cuando nos hiciera falta… como ahora que estamos más pelaos que las ratas. Eso lo hicieron todas nuestras administraciones sin pedirle permiso al pueblo; o sea, que al César lo que es del César... y al pueblo lo que es...
Y poco más. Estaré encantado de debatir contigo de lo que sea en el futuro y sin ningún tipo de acritud. Hasta que tú quieras, Celso.
Saludos cordiales.