Correcto, es cuestión de prioridades. Cuando va todo bien, hay para todos, pero cuando hay que recortar... nadie quiere que quiten de lo suyo. Todo el mundo piensa que lo suyo es lo más prioritario (al igual que el maestro piensa que su asignatura es la más importante, jeje). Cuando no hay harina... :P
Nótese que estamos gastando, aproximadamente, el doble de lo que ingresamos y que, a mi juicio, la situación no va a mejorar en un futuro próximo (bueno, en mi opinión, ni próximo ni lejano) por lo que, aun siendo algunas actividades beneficiosas (qué duda cabe que tener un polideportivo y una piscina en cada pueblo está bien para los lugareños), quizá no nos lo podemos permitir.
Salvando las distancias, digamos que si yo en mi casa gano mil y gasto dos mil, y pago la luz a base de cofidises, quizá debería quitarme del plus, por mucho que me guste (aunque también me gustaría no prescindir).
¡Bah! carnero, oveja. A tu raza, a tu vellón y a tu clan sé leal.