Conservas demasiada fe en la condición humana.
Mi esperiencia me dice que quien tiene la posibilidad de meter la mano en la caja acaba haciéndolo en un altísimo porcentaje, por eso de el que parte y reparte.
La honestidad no tiene nada que ver con la remuneración que se reciba. Se es honesto o no. Hay pobres que lo son y ricos que también lo son. Pero también existen los que siempre quieren más a cualquier precio y son mayoría.
Hay ricos y pobres que siempre tienen la irrefrenable necesidad de llevarse la pastilla de jabón del hotel. Confíales un presupuesto y verás de lo que son capaces.