Desde el punto de vista de uno que se define como “federalista” en esencia, no porque suponga más competencias que el sistema autonómico, sino mas bien por su definición técnica, en el sentido de las competencias las ceden los estados federados al estamento central y no al revés, si bien insisto es un plano bastante teórico porque no creo que el Lander Alemán de Baviera (por poner un ejemplo) le pueda decir al gobierno presidido por su Excelencia Angela Merkel, que no le ceden “asuntos exteriores” a ver que opinaría el pueblo germano.
• TV autonómica: Si, pero no al precio que pagamos por ella, ni por el uso partidista que a menudo hace el gobierno de la comunidad de turno.
• Parlamentos autonómicos: Si, con un ligero adelgazamiento de parlamentarios o sequitos correspondientes.
• Duplicidad con los ayuntamientos, consells comarcals, diputaciones, y la brillante idea de las “vegueries” sin eliminar nada a cambio.
• Embajadas: Desde luego que no, pero si pedir un par de despachitos en la española para agregados culturales y desde luego agregados comerciales que se ocupen de establecer RELACIONES PRODUCTIVAS con el tejido empresarial y comercial de la CC.AA.
• Exceso de funcionarios: Si las competencias a las CC.AA. suponen duplicar temas, absolutamente no, si hay competencia del estado, la comunidad no tiene porque “organizar” un negociado paralelo o a revés.
• Corrupción local: Me parece que no precisa respuesta por ser obvia.
• Guerra de lenguas: Capitulo especial, de entrada en la sociedad, al menos en la catalana, no tenemos problema alguno de convivencia entre los castellano hablantes y los catalana parlantes, ello con carácter general, siempre hay alguno que lleva “su propia guerra” que no responde al sentimiento y a la convivencia de los ciudadanos, y no porque algunos alcen más la voz, significa que sean mas gente, y desde luego la CRISPACIÓN POLITICA EN ESTE SENTIDO NO SE CORRESPONDE CON LA REALIDAD, AL MENOS EN LA CATALUNYA INTERIOR, y tampoco creo que se corresponda con la de Barcelona capital, otra cosa es que políticamente interese que los demás ciudadanos del estado nos vean como unos anti españoles (en general). No obstante nuestra lengua la hablamos 4 gatos comparados con los que tienen como lengua vehicular el castellano, que son algo más de 350 millones de almas, nosotros si llegamos a 6 millones soy generoso, en todo caso ¿Qué pensaría un caballero natural de Zamora que su apreciada lengua castellana fuese alguna vez ninguneada por el inglés por el mero hecho de que son mas hablantes? Pues con toda la razón de mundo se subiría a la parra y no se bajaría ni a la de tres (como debe ser), exigiría un respeto, no.. no, un elevado respeto al castellano, importándole tres cominos si los ingleses son mas o son menos, pues lo mismo para el catalán, ahora bien esto no significa por ejemplo barbaridades como poner traductores antes una misión nicaragüense, o multar por no rotular nuestros comercios en catalán, políticos que el mercado se regula solo, si yo abro una delegación en Santa Coloma de Gramenet, me planteare poner mi rotulo en castellano o como mucho en bilingüe, porque mis clientes tendrán mayoritariamente como lengua vehicular el castellano, este será mi mercado, por el contrario si la delegación la abro en Artesa de Segre, seguro que el rotulo va en catalán, porque la mayoría de mis cliente tendrán esta lengua como habitual. Y desde luego no tendré argumentos para exigir que a Lleida se le llame desde cualquier lugar Lleida (no Lérida), si a la vez a Zaragoza yo catalán la llamó así, y no la llamo Saragossa, porque un metro debe ser un metro desde Lleida o desde Zaragoza, y no medir 1,20 o 0,80 cuando a mi me convenga.
Saludos.-