No merece la pena enfadarse, molestarse, ofenderse, y menos aún discutir, en mayor o menor medida con nadie.
La vida es corta y perder siquiera un segundo, por un mal entendido o una palabra fuera de lugar no es sensato.
La vida intenta enseñarnos a evitar escrupulosamente faltar al respeto en lo más mínimo a cualquier otro ser vivo.Mientras que no aprendamos estaremos perdiendo un valioso tiempo.
1 Saludo.