Firmino Morgado, gestor del fondo Fidelity Iberia nos ofrece su visión sobre las perspectivas del mercado ibérico, así como sus riesgos potenciales y las oportunidades de inversión.
- Valores de crecimiento: empresas que se benefician de la demanda internacional.
- Valores cíclicos (inicio, madurez y final del ciclo): valores que obtienen buenos resultados durante una recuperación económica.
- Situaciones especiales: empresas en reestructuración, en las que el mercado no cree que los cambios vayan a tener éxito.
La mayor parte de los valores típicos de las primeras fases del ciclo (p. ej. medios de comunicación) ya han subido, por lo que estoy encontrando menos oportunidades en este segmento. Sin embargo, encuentro oportunidades de inversión atractivas en valores inmersos en "situaciones especiales". Un buen ejemplo sería Inmobiliaria Colonial, que previsiblemente se beneficiará de unos esfuerzos de reestructuración centrados en reducir deuda, que se suman a una estructura de capital muy apalancada actualmente.
Otra oportunidad en el ámbito de las situaciones especiales es Amadeus IT Holdings, que debería beneficiarse no solo de la recuperación del tráfico aéreo, sino también de sus planes de expansión hacia la gestión aeroportuaria y el negocio hotelero. En cuanto a los valores de crecimiento, soy un firme defensor de invertir en empresas de calidad, y creo que actualmente tenemos una excelente oportunidad para comprarlas, ya que muchas empresas de esta categoría están infravaloradas debido al rally de las acciones de perfil valor que hemos visto desde la segunda mitad de 2013.
Catalizadores de la recuperación económica
Los países ibéricos han sido las primeras economías periféricas en salir de la recesión, y considero que se están perfilando para seguir creciendo durante los próximos años.
El crecimiento de España y Portugal se ha debido fundamentalmente a (i) las exportaciones (más de la mitad de las ventas de las empresas del Ibex 35 son internacionales, mientras que las exportaciones a países de fuera de la UE siguen creciendo), (ii) las grandes medidas que se han tomado para reducir los costes laborales, y (iii) los grandes avances realizados en el proceso de reestructuración de los bancos infracapitalizados.
Se han dado, pues, pasos importantes para que los inversores recuperen la confianza y para captar inversión productiva a largo plazo. Creo que la recuperación ibérica está entrando en una nueva fase, en la que el crecimiento de la región comienza a diversificarse mediante una recuperación de la demanda interna.
Existen tres áreas principales que pienso que impulsarán aún más el desarrollo:
- El consumo interno: menos ahorro y más gasto, impulsando con ello la demanda.
- El paro, que está dando señales de mejoría tanto en España como en Portugal, donde la reducción del paro ha sido más acusada (-2,4% interanual en el primer trimestre de 2014).
- La inversión empresarial: después de tener congeladas las inversiones durante un periodo prolongado, las empresas ibéricas están empezando a plantearse incrementar su capacidad e invertir su capital. Las compañías son cada vez más optimistas y la inversión empresarial supone actualmente el 22% y el 18% del PIB de España y Portugal, respectivamente.