Como he comentado en anteriores ocasiones, los ratios de Morningstar hay que tomarlos con cierta precaución. El rating de sostenibilidad (ESG) no sólo incluye criterios medioambientales sino también criterios sociales y de buen gobierno, y está basado en criterios y análisis sobre las compañías en las que invierte el propio fondo. Para que pueda tener impacto en la calificación "de los globos", debe haber previamente un
score de la compañía. Fondos con un porcentaje no pequeño en small y medium caps se ven penalizados por este criterio de calificación. Este fondo tiene una exposición importante a compañías de mediana capitalización, y eso seguramente afecte a su rating.
Por si fuera de interés, aquí la metodología aplicada:
https://www.morningstar.com/content/dam/marketing/shared/research/methodology/744156_Morningstar_Sustainability_Rating_for_Funds_Methodology.pdfEn cuanto a las empresas que mencionas, si están incluidas en el fondo es porque de una manera u otra, y en mayor o menor medida, tienen impacto en la lucha contra el cambio climático.
Amazon, ya que la mencionas, tiene entre sus objetivos tener bajo control su impacto sobre el cambio climático, y lo hace recurriendo al
cloud computing para "electrificar" el tramo final de sus entregas. Te transcribo un fragmento de lo que comenta el gestor del fondo acerca de esta compañía:
"Hoy en día, las empresas dependen mucho de los centros de datos, pero estos puntos neurálgicos para su tratamiento consumen gran cantidad de energía y su puesta en marcha es costosa. El "cloud computing" (en el que los datos se almacenan, gestionan y tratan mediante una red de servidores remotos a través de internet y no en un servidor local) puede mejorar enormemente su eficiencia, rebajar los costes y reducir las emisiones.
Un proveedor de computación en nube a gran escala como Amazon suele registrar ratios de uso del 65%, frente a solo un 15% en el caso de los servidores locales. Si las empresas se pasaran a la computación en la nube, necesitarán un 75% menos de servidores de los que les harían falta en sus instalaciones. Los servidores en la nube también funcionan de forma más eficiente gracias a sus sofisticados sistemas de refrigeración y al mejor diseño de sus instalaciones.
Además, puesto que muchos de los principales proveedores de computación en nube se han comprometido a que su energía proceda de fuentes renovables, la computación en nube emite un 28% menos de carbono que la media global.
El conjunto de estos factores ha logrado una caída del 88% en las emisiones provocadas por la computación de las empresas. La demanda de "cloud computing" seguirá creciendo y el tamaño es una importante ventaja competitiva en este ámbito, tanto desde el punto de vista comercial como para la lucha contra el cambio climático."
Habla también de las bondades del comercio electrónico frente a la venta en tienda física, la optimización en las rutas de reparto basada en la tecnología y alguna cosilla interesante más.