Cada inversor tiene su propia estrategia, su visión de los mercados, su perfil, y en función de todo ello, se configura una cartera adecuada a esas circunstancias. Sobreponderar EEUU o sectores tecnológicos o de salud, no lo veo nada mal. Sin embargo, hacer market timing a mí me resulta especialmente complicado, más con fondos de inversión cuyas órdenes lanzadas no surten efecto inmediato como acciones o ETF's.
Personalmente, para mí el primer paso debe ser conocer el perfil inversor de cada uno, establecer unos objetivos (rentabilidad, horizonte temporal, volatilidad asumible) para, a continuación, determinar la estructura de la cartera (regiones, sectores, tipo de gestión, factores...). Es decir, sentirse a gusto con el riesgo asumido. Una vez establecida la distribución en función de los objetivos, trataría de ir encajando los fondos a ella y no al revés.
A la hora de seleccionar un fondo yo analizo mucha información, pero no me centro sólo en su histórico. Está bien comprobar que los fondos históricamente se han comportado bien, sobre todo en épocas más convulsas, pero como se suele decir, rentabilidades pasadas no garantizan rentabilidades futuras. Yo analizo la estrategia que aplica el fondo, el performance de sus gestores, sus ratios, los valores que componen su cartera, los máximos drawndowns, etc... Pero no descarto ningún fondo por el hecho de tener un corto historial. Puede ser un fondo magnífico, gestionado por un gestor con mucha experiencia y que encaja perfectamente en mi cartera, a pesar de ser de reciente creación.
Cuando tengo preseleccionados los fondos, simulo la foto para ver que su encaje se corresponde con lo que busco. Una vez identificados los fondos que me encajan, la cartera está preparada para hacer pocos cambios en ella. No digo que se deje sin tocar por siempre, la flexibilidad es un valor importante en el mundo financiero, pero también lo es la paciencia y la convicción en uno mismo.
Si hay que adaptarla a nuevas realidades, se adapta, pero con ligeros cambios, no cambiar todo el estudio hecho porque a los 3 meses no se esté comportando como uno esperaba. Cambios en la política de gestión de determinados fondos, o fondos que con el tiempo suficiente no han demostrado comportarse según lo previsto, pueden dar lugar a adaptaciones. O apostar por algún sector en el que se tenga una buena previsión.
Respecto a los fondos que invierten en small caps, a mi me gusta llevar un pequeño porcentaje porque dan ese punto extra de rentabilidad con el que estoy a gusto. Aunque el principal peso se lo doy a fondos que invierten en compañías de mucha calidad y con fuertes ventajas competitivas, me gusta llevar algo en cartera. Lo mismo que los fondos sectoriales que creo que lo van a hacer mejor en el futuro. Pero siempre con cierto equilibrio.
Todo esto no es ninguna recomendación, no soy nadie para recomendar nada, simplemente es lo que yo aplico. Otros compañeros siguen otras estrategias igual de válidas o más.