Este comentario que he encontrado me parece que más claro el agua.
De nuevo la eterna disyuntiva que sólo sirve para confundir aún más a quienes deben hacer frente al pago de una hipoteca.
El argumento de que reducir plazo es mejor que reducir cuota es una falacia, propia de un razonamiento simplista y equivocado.
Aunque parezca una perogrullada decirlo, al entregar una suma al banco, a cuenta del capital pendiente de pago, lo que se reduce pura y simplemente es el capital pendiente de pago, y por tanto desde ese momento ya se pagan también menos intereses, que obviamente se calculan mes a mes, en función del capital pendiente de pago.
Así pues, sea cual sea la opción elegida (reducción de cuota o reducción de plazo), el resultado sería siempre el mismo, en el supuesto teórico de que el dinero que nos ahorramos con la reducción de la cuota, lo aplicásemos en lo sucesivo a aumentar el importe de las amortizaciones anticipadas voluntarias.
Por ello, la mejor opción siempre es reducir cuota, para conseguir a la larga, que el préstamo se pueda pagar en un plazo menor.
La gran ventaja de reducir la cuota, y no el plazo, es que uno puede seguir haciendo esas amortizaciones parciales mensuales, trimestrales, anuales, o como le de la gana, de forma voluntaria, sin la ¨presión¨ o la ¨obligación¨ de pagar una cuota mensual fija mayor, y si algún mes no le viene bien hacer esa amortización, puede permitirse pagar al banco una suma menor que la que estaría obligado a pagar si hubiese aplicado su amortización a reducir el plazo.
Al disponer de más recursos disponibles cada mes (por la reducción de la cuota), también se pueden incrementar los importes o la frecuencia de las amortizaciones anticipadas parciales...... y finalmente, el préstamo se acaba pagando antes.
Los intereses que se pagan no dependen de que las amortizaciones parciales se apliquen al plazo o a la cuota, dependen exclusivamente del tipo de interés y del capital pendiente de pago en cada plazo.
Esto es algo tan obvio, que no debería ser necesario explicarlo, pero lamentablemente, la gran mayoría de los personas que tienen un préstamo hipotecario, no lo entienden...... y por lo que se ve, parece que algunos bancos tampoco.