Se que es muy difícil cuando hay un conflicto, y mas en el caso de las entidades bancarias, porque “una reclamación para ellos es trabajo y para el reclamante es un motivo” (esta definición no es mía es de otro forero y la verdad es que me gustó), hay que intentar mantenerse en un plano profesional, como si fuese un encargo para un cliente, y esto es muy difícil de hacer cuando afecta a uno. El ir al defensor del cliente no es una amenaza es un derecho, se le comenta al director que es tu intención sin cabreos y si se lo toma a mal será problema de él.
Yo recomendaría que cuando se toma la decisión de ir a reclamar hay que mantenerse firme, no se debe amenazar, aún cuando no creo que acudir al defensor puede ser considerado amenaza de nada, si viene el lobo, es que viene, cachas en estas cosas ninguna, si se dice es que se hace, si no se quiere hacer no si se comenta.
Donde trabajo a veces tenemos algún problema de cobro (quien no en estos tiempos) se intenta negociar plazos aunque sean largos, dar facilidades, llegar a acuerdos, pero si la otra parte no atiende a razones y ves que tiene alguna posibilidad si se le dice que en 30 días se pasa al juzgado, el día 31 se le manda una carta con la copia de la presentación al juez. Bueno hay casos que no es posible esto porque la vida es la que es, y en ocasiones no hay solución por mas buena voluntad que exista, obviamente no se puede tratar igual al que ya no tiene forma de ganarse la vida, que a los que son unos jetas, no es lo mismo ni de lejos.
Bien solo pretendí decir con este rollo que cuando se toma una decisión hay que ser consecuente, las cachas para quien le guste jugar a las cartas, en la vida económica yo opino que ni una.