El fuerte aumento del empleo registrado en el último año, junto a las mayores subidas salariales alcanzadas en los nuevos convenios colectivos firmados y la revalorización de las pensiones que ha tenido lugar este año (consecuencia de la elevada inflación media de 2022) explican este aumento de la renta bruta disponible, que ha sido ayudada también por los mayores ingresos de los autónomos y el crecimiento de las rentas de la propiedad (por pagos de dividendos y de otras rentas de capital).
El aumento de la renta bruta disponible hace prever un mayor crecimiento del consumo en los próximos trimestres (de hecho, es lo que está ocurriendo ya, según los cálculos del INE sobre la composición del crecimiento económico en el último trimestre), lo que permitiría pensar en un mayor crecimiento del PIB.
Junto a ese aumento del consumo (se calcula que la bajada de un punto en la tasa de ahorro contribuye con 0,4 puntos al aumento del PIB), la mayor renta bruta disponible permite también hacer frente a los posibles mayores gastos, financieros y no financieros, al tiempo que eleva el posible excedente destinado al ahorro.
Esto es lo que dice el articulo de un periódico que esta siempre en contra del gobierno.