Cinco meses después de su polémica salida nocturna en un bar de copas
incumpliendo el horario de cierre y de tener que pedir perdón a la ciudadanía por su conducta poco ejemplar,
Francina Armengol ha vuelto a saltarse sus propias restricciones. La presidenta del Govern balear asistió este lunes a una
comida junto con otras ocho personas en el salón de plenos del Ayuntamiento de Ibiza el mismo día que los bares y restaurantes de la isla abrían tímidamente sólo sus terrazas tras más de dos meses cerrados.
La cita se produjo apenas 48 horas después de que el Boletín Oficial de las Islas Baleares publicara las restricciones en Ibiza hasta el 11 de abril que impiden, entre otras cosas, comidas de más de cuatro personas y de hasta dos núcleos convivientes exclusivamente en el exterior de los bares y restaurantes de la Isla. La comida de la presidenta, por tanto, no podría haberse celebrado en un local de restauración porque duplicaban de sobra el límite de personas permitido y, además, pertenecían a grupos de convivencia de más de dos núcleos.
Armengol llegó al Ayuntamiento de Ibiza este lunes sobre las dos de la tarde después de haberse desplazado a Formentera para presentar junto a la presidenta del Consell, Alejandra Ferrer, un paquete de ayudas directas destinadas a empresas y autónomos para hacer frente a las consecuencias de la Covid-19.
Además de la presidenta, asistieron a la comida el alcalde socialista de Ibiza, Rafa Ruiz; el conseller de Movilidad y Vivienda y secretario general de la Federación Socialista de Ibiza (FSE), Josep Marí Ribas Agustinet, y empresarios como el vicepresidente de la asociación hotelera de Sant Antoni y promotor de eventos deportivos, Juanjo Planells; la distribuidora de bebidas Laura Miró; el presidente de la Federación Insular del Taxi de Ibiza, Antoni Riera; Vicente Ventura, director financiero para Europa de Palladium Hotel Group; Juan Riera, Juanito, de Can Alfredo; y el presidente de la Pimeef y también distribuidor, Alfonso Rojo, según informa El Periódico de Ibiza.
Desde el Ayuntamiento de Ibiza
no niegan la comida, a la que se refieren como una «reunión de trabajo», y aseguran que se
cumplieron las normas sanitarias, aprovechando que la presidenta tenía un espacio de tiempo libre para hacer una reunión con un grupo de personas. La jefa de protocolo del Ayuntamiento de Ibiza, Lourdes Roig, convocó el encuentro a petición del alcalde de Ibiza con un único punto del orden del día: las ayudas del Gobierno.
El gabinete de la presidenta Armengol califica el encuentro de «reunión de trabajo en el Ajuntament d'Eivissa» pero tampoco niega a ABC que los participantes comieran en el salón de plenos ya que la normativa les impedía celebrar ese ágape en un restaurante. El portavoz de la presidenta remite al Ayuntamiento de Ibiza para aclarar por qué en la agenda institucional la cita aparecía como «comida privada» y no aclara si se incumplieron las restricciones: «para dudas sobre la normativa, a la conselleria de Salud»
Esta comida vuelve a poner en entredicho la ejemplaridad de los representantes institucionales, en particular la de Armengol, quien por segunda vez vuelve a saltarse sus propias restricciones para celebrar una reunión que bien podría haberse celebrado de forma telemática o presencialmente sin comida de por medio.
Comida privada
De hecho, el acuerdo del Consell de Govern del pasado 12 de marzo sobre las Medidas en el ámbito de desarrollo de la actividad laboral, profesional o funcionarial recomienda que «el desarrollo de la actividad laboral o funcionarial se ha de llevar a cabo preferentemente en régimen de teletrabajo, siempre que este régimen de prestación no sea incompatible con las características del lugar de trabajo. Se recomienda evitar reuniones de trabajo o profesionales hechas de forma presencial».
De hecho, según confirman varios asistentes, durante el encuentro se habló básicamente del plan de ayudas y ser recabaron las opiniones de los presentes, es decir lo mismo que se hizo horas más tarde en el salón de plenos del Consell de Ibiza. Tras la comida privada, la presidenta realizó una visita institucional al Recinto Ferial donde se había puesto en marcha horas antes la vacunación masiva. La acompañaron Vicent Marí, Rafa Ruiz y otras autoridades. Posteriormente fue a la reunión con los agentes sociales que se celebró en el Consell de Ibiza.
Según relatan fuentes presentes en la comida, los asistentes se sentaron en los escaños de los concejales manteniendo la distancia de seguridad y llevaban mascarilla salvo en el momento de comer o beber. Los tres políticos se sentaron en la misma mesa —algo que habría estado prohibido en un restaurante, incluso en la terraza—, y en las otras dos por un lado, Juanjo Planells, Laura Miró y Juan Riera, y por otro, Toni Riera, Vicente Ventura y Alfonso Rojo.