La campaña que ha puesto en marcha este verano el Gobierno para erosionar el liderazgo de Alberto Núñez Feijóo (PP) no hace mella en su proyección electoral, al menos según el último sondeo de NC Report del mes de agosto. En julio, en la primera encuesta realizada tras las elecciones andaluzas, el PP se disparaba hasta los 138-140 escaños, situándose a sólo 36 escaños de la mayoría absoluta. Entonces, tenía «caliente» el impulso de la mayoría conseguida en Andalucía por Juan Manuel Moreno.
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El análisis. Un “pato cojo”
Ahora, bajo el «fuego» de Moncloa y de la dirección socialista, dentro de su estrategia dirigida a centrar todos los ataques en la imagen del líder de la oposición, el PP todavía mejora más sus expectativas y podría sumar otros dos escaños, para llegar a los 142, con un 34 por ciento de los votos y 3.197.828 votos más que los que obtuvo en las últimas elecciones generales de noviembre de 2019. Los ataques a coro de ministros y dirigentes socialistas contra Feijóo, y con la ayuda de todos los satélites de la izquierda, redundan en 456.225 votos más para el PP en un mes.
En esta encuesta, realizada entre el 23 y el 27 de agosto, el PSOE tiene una proyección de voto que se queda en el 23,8 por ciento, lo que le dejaría entre 90 y 92 diputados. Podría llegar a perder hasta 30 escaños con respecto a las últimas elecciones, como consecuencia del millón de votos que renuncia a apoyar sus siglas. El desgaste socialista se une al que sigue sufriendo Podemos y aleja la posibilidad de que puedan reeditar el Gobierno de coalición.
Los morados se mueven entre los 23 y 25 diputados, es decir, de 10 a 12 menos de los que consiguieron en las generales. En votos, la caída llega hasta los 767.152. El deterioro de Unidas Podemos está estabilizado con respecto a anteriores encuestas, lo que prueba que los votos que sigue perdiendo el PSOE no miran, de momento, hacia la plataforma que quiere liderar Yolanda Díaz. El problema de la izquierda es la abstención, pero también la fuga hacia el PP. Ésta es precisamente la clave de la ofensiva contra Feijóo, que tiene como fundamento trasladar a la izquierda y a los votantes más moderados la idea de que el político gallego es un «radical». En contra de este relato está la imagen que el líder popular ha construido en su amplia experiencia en política y como gestor, avalado por las cuatro mayorías absolutas que acumuló como presidente de la Xunta.
En este arranque de curso, y cuando las maquinarias electorales de los partidos se engrasan para las elecciones autonómicas y municipales de mayo, la izquierda arranca a la baja, sin margen para sumar una mayoría de investidura con los socios que hoy les sostienen en Moncloa. En la derecha, el PP aún no ha tocado techo según esta encuesta, y la radiografía del bloque de centroderecha sigue confirmando la extinción de Ciudadanos (Cs), que conservaría un solo escaño, y la ligera tendencia a la baja de Vox, que sufre también las consecuencias del relevo en la dirección popular. Vox podría conseguir hoy entre 41 y 43 escaños, entre 9 y 11 menos que en las pasadas elecciones. En votos, pierde 456.030. La fuerza que preside Santiago Abascal está recibiendo señales de alarma que no había tenido hasta ahora. En julio, cuando su resistencia empezó a flaquear y mostró sus primeros síntomas de debilidad, perdía entre siete y nueve diputados y 173.859 votos.
El nuevo equipo del PP ha conseguido hacer sombra a la figura de Abascal, que además tiene que lidiar con problemas internos. En Andalucía no cumplieron las expectativas y la salida de Macarena Olona no ha sido tan pacífica como oficialmente han intentado maquillar. Las elecciones de mayo son un gran reto para este partido que, como le ocurre a Podemos, tiene debilidad orgánica en el plano territorial. No cuenta con un «banquillo» de dirigentes con experiencia y formación ni tampoco con las estructuras estables que sí poseen los partidos tradicionales. El complicado contexto económico suma a favor de la estrategia de los populares de aglutinar el voto útil y resta contra los intereses de Vox, ya que la ciudadanía busca una siglas refugio que den estabilidad, según el análisis demoscópico.
El estudio del trasvase de voto confirma esta conclusión. En este sondeo, el PP se afianza como el partido con más fidelidad, hasta el 95,9 por ciento de sus votantes de 2019 compromete su apoyo en las siguientes elecciones. Vox pierde confianza, baja al 75,9 por ciento, y son votos que revierten en las siglas del PP. Un 22 por ciento de los votantes de Abascal asegura que hoy daría su papeleta al PP. La fidelidad al PSOE es del 79,5 por ciento, con casi un 10 por ciento que confirma que hoy se inclinaría por la opción que representa Feijóo. Podemos tiene una fidelidad del 70,4 por ciento, y su mayor agujero está en la abstención.
creo que tienes razon ....sanchez cada dia que pasa tiene mas apoyos y sin duda pasara por ser el mejor estadista que ha tenido españa en estos cinco ultimos siglos...las encuestas incluidas las del diario.es estan todas manipuladas por las meigas gallegas compradas por el brujo de feijoo....la realidad es que el psoe y podemos juntos obtendran todas las alcaldias de mas de 5000 habitantes y todas las presidencias de las comunidades. sanchez es un visionario tanto en politica internacional como en economia solo hay que ver como ha conseguido que la luz el gas los alimentos.....suban solo a los ricos y por supuesto las familias mas humildes en españa estan de enhorabuena con semejante estadista ....viven cada dia mejor gracias a sanchez.....en fin yo estoy seguro que si celebraran las generales obtendrian psoe mas podemos al menos 322 diputados...... jjjjj
Parece que no has entendido nada de mi mensaje. Es muy sencillo, el ñoño Feijoo tiene al enemigo en casa, ¿es necesario ponerle nombre y apellidos? ¿Crees que ese enemigo se va a conformar con apuñalar a aquel chico llamado Pablo y que ya tenía un pie en la Moncloa, pero ahora nadie lo conoce? No seré yo el que glose a Sánchez, pero los hechos son tozudos. Mira dónde están todos los que compitieron con él para llegar a la Moncloa. Han sucedido muchas cosas en estos últimos años y la mayoría no ha sibrevivido, será por algo.
Yo estoy con Sánchez hasta la muerte qué gran estadista es es es tan bueno como tú yo de verdad preséntate en las próximas elecciones de segundo de a bordo de Sánchez creo que vais arrasar vamos cuenta con mi voto y el de todo el foro porque todo el mundo te sigue como una persona de un nivel superior ánimo y así luchando porque creo que puede ser un gran líder para el futuro de España y no te digo nada de Vascongadas bueno ahora se llama país Vasco vale hala onguitorri
Los sondeos que maneja Génova sobre la Comunidad de Madrid colocan a la presidenta autonómica, Isabel Díaz Ayuso, en situación de alcanzar la mayoría absoluta (69 escaños) si se celebrasen ahora elecciones regionales, según fuentes populares. Sería una mejora de los resultados cosechados el 4 de mayo de 2021, cuando se quedó a cuatro diputados y tuvo el apoyo de Vox. Esta subida en respaldo ciudadano tiene la importancia de que se produce después de que Ayuso tomara las riendas del PP de Madrid el pasado mayo.
Precisamente, el hecho que de la anterior dirección del PP fuera retrasando el Congreso de los populares madrileños generó tensión entre Génova y Sol, saltando todo por los aires cuando Pablo Casado puso en duda públicamente la ejemplaridad de la presidenta por la relación comercial que su hermano mantuvo con una contratista de la Comunidad para el suministro de mascarillas.
En cambio, el nuevo líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, defendió desde el principio la honorabilidad de Ayuso y su dirección no puso obstáculo alguno a la celebración del Congreso del PP de Madrid tan pronto como quisiera la presidenta de la Comunidad. Este cónclave se celebró finalmente los días 20 y 21 de mayo y el propio Feijóo estuvo arropando a su compañera de filas, a la que define como gran activo del PP.
Con todo, Feijóo subrayó este lunes en rueda de prensa que «aquí no hay nada ganado; nuestro objetivo no puede ser sólo ganar unas elecciones o entrar en una disparatada y larguísima carrera electoral, sino priorizar las soluciones a los problemas», afirmó.
La buena relación entre Feijóo y Ayuso, pese a los ataques de Moncloa tratando de vender una división inexistente, tiene su reflejo también en este arranque del curso político. Según fuentes de Génova, la presidenta madrileña pidió que Feijóo le acompañara el próximo viernes en el inicio del curso del PP de Madrid y el líder del PP accedió encantado a estar con ella en Alcalá de Henares.
Lo mismo ha hecho Feijóo con otra petición de Juanma Moreno para un acto similar este miércoles en Málaga. El presidente Moreno ya alcanzó la mayoría absoluta en las elecciones a la Junta de Andalucía que tuvieron lugar el pasado 19 de junio. Fue la primera vez que lo conseguía el PP en esta comunidad, feudo socialista hasta 2018. Tanto Juanma Moreno como Ayuso, junto a los presidentes de Galicia (Alfonso Rueda), Castilla y León (Alfonso Fernández Mañueco) y Murcia (Fernando López Miras) estuvieron con Feijóo el pasado sábado en Pontevedra en el tradicional inicio de curso a nivel nacional.
Candidatos
En paralelo a su acción de Gobierno, plantando cara a los ataques de Pedro Sánchez, como ha hecho con el anuncio de recurrir al Tribunal Constitucional el decretazo energético, el equipo de Isabel Díaz Ayuso, ya con manos libres, trabaja desde el congreso regional del PP de Madrid en la preparación de las elecciones municipales y autonómicas de mayo de 2023.
Así, el pasado julio, fueron designados los primeros candidatos a alcaldes, apostando por caras nuevas para los carteles electorales, pero con probada experiencia en política. Todos ellos son personas «preparadas, comprometidas, humildes, trabajadoras y, sobre todo, con muchas ganas», enfatizó la presidenta de los populares madrileños.»Estamos muy volcados con la situación que se está viviendo en toda España; creemos que el Partido Popular es ahora más necesario nunca», destacó Ayuso, consciente de su responsabilidad en contribuir a que Feijóo llegue a La Moncloa.