Cada vez que ha hablado sobre esto, siempre me ha parecido un sopazas el Almunia. Ante sus aseveraciones de que no deben utilizarse "ayudas estatales" para solventar los problemas de quienes decidieron colocar su dinero "en instrumentos financieros de alto riesgo", echo en falta a quien le pregunte su opinión de aquellos a los que, mediante engaño, se les colocó este producto sin ellos quererlo. A ver qué pasaría, ver si en tal caso se podría echar un vistazo a dicho caso, pero con cuidado, no sea que se hernie el probecito.
De todas formas algo de lo que dice este enlace merece un repaso:
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La fórmula que se baraja es la de intercambiar las preferentes por depósitos a plazo fijo tradicionales. De tal manera que, vencida la duración, el dinero pueda retornar a las manos de los inversores.
Joaquín Almunia aseguró que la Comisión Europea no es ajena a la situación creada y que el organismo europeo la está "siguiendo de cerca". A pesar de ello, matizó que deben ser los accionistas de las entidades y no los contribuyentes quienes corran con los gastos de las reestructuraciones que afrontan los bancos europeos.
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Todo suena bien, parece bien, pero insisto. ¿Es que no hay nadie cerca del tolai éste capaz de preguntarle sobre los engañados en la venta de preferentes? ¿Se les trataría igual, es decir, un 'os jodéis, pringaos'?