Re: Afectados participaciones preferentes Cajasol/Banca Cívica
Resumen, más o menos, de la situación, en relación a Banca Cívica:
Tras cierre de plazo de canje y Junta de Accionistas.
Primero, me comunicaron que no dan a nadie copia del CD, por cuestiones de protección de datos. Una tontería, ya veremos como lo resolvemos.
En la Junta se trató por el secretario del consejo de que no se hablara de las preferentes, pues no estaba el asunto en el orden del día. HIzo indicaciones a los accionistas que lo intentaron, sobre todo al grupo de Adicae, que comenzó las intervenciones. A pesar de ello, el presidente, señor Pulido, en su discurso, si habló de ellas, del éxito que supuso el canje, como le recordaron los intervinientes de Adicae. Se marco Pulido un discurso hablando de la grave situación económica en su conjunto, y de los efectos de los "marcos regulatorios cambiantes", como si estos (los Decretos, los legisladores, el Gobierno) fueran los culpables de como andan las cosas. Que si que lo son, pero sólo en parte. Habló el presidente del Banco de una economía endemoniada. Y de que que bien había salido todo, tanto para Banca Cívica, como para sus accionistas. Que incluso recibirán dividendos de al menos 20 céntimos este año.
Que que maravilla ser absorvidos por Caixabank, que todo el mundo feliz y los mundos de yupy. No hizo mención al cierre de oficinas ni al despido de al menos cuatro mil de los diez mil trabajadores. Un buen acuerdo.
Comenzaron los accionistas a comentarle al consejo que si, que había sido un éxito acabar con las cajas, instituciones sociales con ciento cincuenta años de historia, al servicio de los ciudadanos y de la sociedad. Un honor haberlas liquidado, saqueado sus cuentas y malvendido el patrimonio. Para sentirse orgullosos. Y la gestión del consejo, magnífica. En un solo año han logrado que el valor de la institución descendiera en la misma proporción que aumentaron sus retribuciones, pero a la inversa. Banca Cívica vale un 40% menos, y sus sueldos han subido un 40%.
De los 6000 millones de pérdidas camufladas en las cuentas no hablo el presidente, sino algunos accionistas. Pero no les llamó mucho la atención.
Se trato de contagiar el espíritu de alegría que debía imbuirnos a todos por ser socios de la Caixa. Todo el marrón de Banca Cívica quedaría diluido en Caixabank y pasaría desapercibido.
¿Y las preferentes?
Nada, que si hay que hablar se habla. Yo le tomé la palabra. En cuanto alguien me de un poder, voy a hablar con él. Pero antes del tres de agosto, que ese día se produce el canje de acciones y desaparece Banca Cívica.
El canje, como estaba, 5 acciones por 8. Cotización media de los últimos 90 días. Como ya han transcurrido sesenta, por ahora se puede decir que la cosa no es un desastre. A día de ayer claro.
Por que a pesar del discurso que se largo, se le olvidó mencionar que se absorbía a B. Cívica por una entidad que si, que se había salvado de ser calificada esa misma mañana como bono basura. Pero que esta a un escalón, sólo. Es decir, el mes que viene puede que Caixabank sea bono basura también. Y a la mierda el canje de acciones de una por otro y los precios y valores calculados.
Como la cosa no tenía ningún sentido, cuando me toco hablar, me dediqué a hacer solo unas observaciones al discurso del presidente.
Parecía que Banca Cívica había hecho un buen negocio. ¿Serán tontos los de la Caixa? Todo son ventajas. En el discurso, claro.
A mi me parece que es una auténtica locura. Así que le recordé algunos detalles que ellos han pasado por alto. Los flecos jurídicos. Les pregunté si sabían si los habían cerrado o no.
Cosa como por ejemplo si el acuerdo de la asamblea general de la Caixa para constituirse en banco tenía las firmas de los compromisarios depositantes clientes de la Caixa, que andan las malas lenguas diciendo por ahí que está desaparecido y que el acuerdo es nulo. Y que no aparece. A ver si se viene abajo todo el instalache por una tontería de ese tipo.
Pero eso realmente carece de importancia. La cosa era que iba pasar en el futuro. Ellos lo veían todo color de rosa.
Yo no.
Le comuniqué que yo estaba viendo un monstruo. Donde ellos veían una sociedad fuerte, como casi, creo, ocho mil millones de capitalización bursatil, yo veía un engendro peligroso. Voy a decirles por qué:
Actualmente, CaixaBank cuenta con un capital de 3.840.103.475 acciones de un euro de valor nominal cada una. Pero había emitido 4.800.000 de títulos de participaciones preferentes. El canje, en obligaciones subordinadas a diez años y en convertibles supuso valorar la acción de tal manera que aparecerán necesariamente casi 1.250.000 acciones más en un momento dado. Un buen trozo de su capital. Habrá que hacer la correspondiente ampliación.
Por otra parte,lo de Banca Cívica no tiene nombre. Fíjense ustedes como ha sido la cosa, y como estos señores en realidad lo tienen todo previsto con mucha antelación. Pero mucha. Más de la que ustedes siquiera puedan imaginar. Por ejemplo, esta absorción, que probablemente estaría acordada desde hace varios años. 2008 o 2009, calculo yo. Les recuerdo, como siempre, que los banqueros hacen negocios ha largo plazo. A más largo plazo que nadie. No lo olviden nunca.
Banca Cívica tenía, o tiene , 497 millones de capital. Nunca debió tener mas de un cuarto de participaciones preferentes. Sin embargo tenía 900 millones, y de eso, doscientos y pico de millones emitidos en 2011. O sea, superando los límites de la locura, continúo emitiendo eso. Como imaginarán, nunca se habría producido la conversión de los partícipes preferentes en accionistas si eso conllevaba la posibilidad de que la ampliación de capital hubiera supuesto que los que tenían preferentes de pronto supusieran el 60 % del capital social, porque entonces hubieran estado fulminados al segundo. ¿Como se explica entonces lo que ha pasado?
Está claro que para quedarse definitivamente con el dinero de la gente, al trasformarlos en accionistas, estos no deberían de ninguna manera, de ninguna, acceder al poder que dan las acciones. Así había que "diluir", como ellos llaman a que tus acciones pierdan poder y peso, a esos preferentes. La absorción en tiempos dilatados era lo ideal. Al producirse los canjes, era necesario atribuir un valor bajo a los canjes. Y que completados todos los canjes, nunca supusieran esto nuevos accionistas un peligro para ellos. Y el diseño del asunto parece haberles salido bien. ¿Por qué?
Por que el canje de acciones de la absorción producirá lo siguiente:
Sobre los 3.840.103.475 de acciones de CaixaBank, la absorción supondrá una ampliación de capital equivalente a 5 acciones de CaixaBank por 8 de Banca Cívica. Eso quiere decir que habrá 310.000.0000 de nuevas acciones de CaixaBank, las de Banca Cívica. Así que primer punto conseguido. La gente de Banca Cívica no pintará nada en CaixaBAnk. Ni el 10%. Hala, primer problema resuelto. ¿Y que pasa con la gente de las preferentes?
Pues que hemos puesto unos límites de valor. A la gente de Caixabank les damos unos 1.250.000.000 de acciones. Y a la gente de Banca Cívica les daremos unas 455.000.000 acciones, o menos. ¿Como quedará la cosa cuando la gente de las preferentes se convierta en accionista?
Sumemos:
3.840.103.475 de acciones de CaixaBank de ahora + 310.000.0000 de nuevas acciones de CaixaBank, de las de Banca Cívica (todo esto es aproximado, disculpen los fallos en los cálculos, que algunos habrá)+ el 1.250.000.000 de los preferentes de la Caixa, más los 455.000.000 de acciones de las preferentes de Banca Cívica.
Un montón de números y de acciones, y que se preguntarán ustedes qué por qué tienen importancia. Pues porque de 5.855 millones de acciones, resulta que aproximadamente 1.700 millones de acciones, que suponen casi el 30% de la sociedad, NO QUIERE SER ACCIONISTA.
No es que estén en desacuerdo con lo que han hecho los gestores, es que son accionistas obligados a serlo.
Y eso es un pico importante, además de suponer una situación demencial, una sociedad donde un montón de accionistas no quieren ser socios.
El día en que puedan vender sus acciones las personas que son accionistas obligatorios por haber sido engañados con las preferentes, todas esas personas venderán como puedan y por lo que sea. Desplome del valor. Asegurado. Perdidas para todos. Un tercio de los accionistas están esperando ese día para poder huir. Y cuando huyan y consigan recuperar algo (que puede oscilar entre un 20% y un 60%, como mucho, y ojalá me equivoque y sea más) serán además personas que como clientes abandonarán de inmediato a ese maldito banco que les enganó. Con el consiguiente problema de perdida de clientes y mal negocio para la empresa, lo que hará que aún baje más el valor de las acciones para los osados que se queden a la espera de tiempos mejore. Un desastre en toda regla y una bonita forma de estropear todo lo que se pueda una situación. Estos gestores no es que estén hasta arriba de soberbia- Es que están locos. Y les han hecho y harán un daño terrible.
Seguiré con este texto más tarde, para aclarar que pasará con los que han firmado el canje y con los que no, disculpen la interrupción.
Porque la final del proceso, cuando solo haya acciones, habrá un total, siempre digo aproximado, que los números no son exactos, de