Las cooperativas son sociedades de capital variable. Respetando el mínimo legal estatutario, el resto de capital lo emiten y amortizan a conveniencia.
Eso sí, las cooperativas, especialmente las de crédito, tienen una especial reserva en la ley a la hora de devolver las aportaciones al capital social. En caso de necesidad económica, pueden llegar a haber retrasos considerables.
Las aportaciones voluntarias al capital social de una cooperativa pueden ser muy seguras. Pero... NO SON UN DEPÓSITO.
Respecto de la aportación mínima obligatoria (por ley, imprescindible para poder ser cliente), puede haber perfectamente "corralito", si la situación de solvencia de la entidad lo aconseja, o incluso pérdida total del capital. Es capital social, recuperable si te vas de la entidad, pero con capacidad de ser retenido, o incluso absorver pérdidas.
La remuneración de las aportaciones acostumbra a ser mixta. Una parte como rendimiento explícito (el x % de interés), y otra parte, como revalorización de la participación, que se "toca" tanto en el aumento de los intereses futuros (el mismo x %, pero sobre mayor cuantía), como en el mayor valor de la aportación cuando se recupera.
la plus belle des ruses du Diable est de vous persuader qu'il n'existe pas!