Pues no sé qué decirte, mi madre no tenía estudios universitarios de ningún nivel. Éso sí, de pueblo, espabilada para la vida como la que más. La educaron para cocinar, bordar, ordeñar vacas y todo lo hacía de miedo de bien y nunca la engañaron en una entidad bancaria. Tenía lo que quería tener (de productos financieros) y, sin embargo, a mi padre con dos carreras universitarias, pero más confiado que ella sin duda, le han colado tanto en el Santander como en el BBVA toda la basura que han ido encontrando tirada por ahí... y a mí lo mismo, quizá no tanta como a él -tampoco tenía tanto dinero-, pero también un par de maravillas, productos milagro de alto riesgo.
¿De qué te sirven los estudios si confías en la gente?
Por cierto tengo una colección de minerales desde que era niña, tengo calcopirita en casa, cualquier día le hago un par de fotos ;-) y te las subo... De isótopos tanto radiactivos como no radiactivos sí que estudié en la Uni, algo que no me ha servido de nada en la vida, pero hubiera sido mucho más práctico que ya en el colegio, nos hubieran dado unos cursillos elementales de Economía y Finanzas.
Creoq que una persona con estudios está algo más capacitada para empezar a aprender algo ajeno, pero no para comprender que le están mintiendo en una oficina bancaria; para ello lo mejor es O tener estudios de Economía (no he conocido a ningún Economista de 40 años, que le hayan colocado PRF SOS), o ser desconfiado por naturaleza.
Creo que el juez que evalúe una "presunta" estafa, debería tener en consideración qué perfil histórico de ahorrador ha tenido el cliente, más que valorar si sabe mucho de Filosofía, de Música o de Quimica inorgánica, materia apasionante dónde las haya...
También el Defensor del Cliente debería tener ésto último en consideración para poder realmente DEFENDER al Cliente, algo que dudo mucho que quiera.
Si un amigo es de verdad, su amistad perdura en el tiempo y con la distancia.