cualquier trabajador en este país es acribillado a impuestos.
Una empleada de un supermercado comenta un día mientras atendía que cobra 850 euros limpios después de que le descontaban 50 de Seguridad Social.Pero es que su empresa tiene que añadir el 31% de cuota empresarial (unos 270 euros), que forma parte de sus costes laborales. Aunque no pague nada de IRPF, con su modesto sueldo tiene que pagar un 26% en su factura de la electricidad, un 21% en cualquier servicio, el 70% si pone gasolina al coche... con los cual seguramente un 50% de lo que gana al final se va en impuestos.
Si el gasto público es del 40% del PIB y fundamentalmente lo pagan los trabajadores (unos 15 millones en el sector privado), pues no te sale que cualquier trabajador paga más de un 50% en impuestos.
Y el trabajador que citas de 70.000 euros, es que además paga un 30% de IRPF; con lo cual, no paga menos de un 60-70% en impuestos, sin exagerar. Esto NO es contribuir, es una expropiación.
Y luego resulta que tienes no solo al empleado del super ganando 800 euros y al informático 1.000, es que el que en el Metro de Madrid el sueldo más bajo son 2.000/mes, por ponerte un ejemplo, en el ayuntamiento de Madrid, por gente muy cercana que conozco, ganan un 40% más que en el sector privado con un 20% menos de horas.
El problema gravísimo son esos sueldos en el sector público, que deberían estar referenciados a los del privado (como por cierto, me parece que ocurre por el norte de Europa, donde les va un poquito mejor) y no las falacias que nos venden aquí los sindicatos de que los funcionarios ganan poquito, por eso tienen tantos días libres y jornadas más cortas.
Aparte de que cualquier servicio público está sobredimensionado de personal sin encima ninguna responsabilidad, la suma de todo esto tiene como consecuencia unos servicios públicos pésimos (esta semana pasé por la biblioteca, que da servicio como a 80.000 vecinos en la zona de Madrid donde vivo; habían comprado 15 libros en un mes, calcúlame el gasto por ciudadano. Eso sí, personal, el doble del que hace falta).
Y llevando esto a las pensiones, es imposible pagar a la gente que entra con pensiones medias de 900 euros si los cotizantes ganan 800, si aumenta cada vez más la esperanza de vida y no hay gente joven.
Lo que pasa es que los jubilados votan masivamente (como ha pasado en el Brexit o en USA), y encima ahora aquí se nos ha instalado en la oposición los Reyes Magos (aunque sean republicanos) y todo son "derechos": más salario mínimo, más renta de inserción, más de todo sin explicar de dónde sale el dinero.
Y el problema de los funcionarios, ¿quién lo va a arreglar: Mariano, que es funcionario en excedencia, o sus acólitas Soraya y Cospedal, que más de lo mismo: abogadas del estado en excedencia, o en el otro lado, Pablo, Iñigo, Bescansa, que vienen de la Universidad Pública? ¿o en Madrid, Carmena (jueza jubilada) y Esperanza (también funcionaria)? El poder legislativo y ejecutivo está copado por funcionarios que no van a tirar piedras contra su tejado, y por los votos, van a dar largas al problema de la pensiones. Por exclusión, el trabajador del sector privado va a seguir siendo masacrado para pagar todo el gasto público insostenible.