Cachilipox
23/04/20 13:04
Ha respondido al tema El protagonismo que nuestro gremio de economistas tiene en esta salvaje crisis económica
Ir a respuesta
De nuevo te reiteras, escondiéndote en una larga perorata pretendidamente aséptica lo que es una visión puramente ideológica antipodemita.No pasa nada por ser antipodemita. Incluso por ser economista y antipodemita.Pero no pretendas ocultar o esconder tus prejuicios ideológicos (totalmente respetables), tras la máscara de la "sabiduría del gremio".¿Acaso como economista prejuicioso pretendes decir ahora que antes que unos mensajes realistas de la ministra Díaz es mejor un "optimismo patológico" del presidente Zapatero?¿Condenamos a la hoguera también a Antonio Catalán -AC Hoteles- que afirmó no hace mucho en la televisión que todo el año 2020 está ya perdido, o a Gabriel Escarrer -Melia Hoteles- que afirma que esto va a tener el mismo impacto que una guerra y nos enfrentamos a la desaparición de una parte importante del tejido industrial?Que en economía y en decisiones de inversión priman las expectativas es cosa sabida, de la misma manera que el empresariado NECESITA previsiones (que no predicciones) realistas. Yo podré tomar decisiones de arriesgarme e invertir cuando sea el momento adecuado. SI lo hago antes o de forma temeraria y contra cualquier escenario de prudencia previsible, lo más seguro es que me estrelle. Es perdonable llegar tarde, me perderé oportunidades. Pero es imperdonable precipitarse. Una empresa enferma puede sanar. Una empresa muerta no sirve de nada.Supongo que como economista sabrás que la vida de una empresa es la tesorería. La "caja" de toda la vida. Más allá de la cuenta de resultados, los EBIDTAS o cualquier otra ratio que te puedas imaginar. Mientras hay caja (tesorería), hay esperanza. Sin tesorería, por muy chachipiruli y resultoso que sea tu negocio, estás muerto. Lo peor de lo peor que podría decidir ahora cualquier empresa, y más la de ciertos sectores críticos, es precipitarse en decisiones de inversión, y vaciar la tesorería por decisiones de inversión inciertas. No se tiene ni idea ni del QUE ni del CUANDO. Ahora hay que estar quietos parados, contemplando escenarios, y modelizando posibilidades de futuro. Y preservando como oro en paño la caja y tesorería que se disponga.