Un tratado de libre comercio es en sí una contradicción. Si el comercio es libre, es libre. Como no lo es, hace falta un tratado. Como ya saben, Trump retiró a los EEUU del Acuerdo Transpacífico de Cooperación (TPP), que incluía a 11 países y representaba un 40% del PIB mundial. También ha anunciado que renegociará las relaciones con Canadá y México, dejando claro que sus promesas de
El presidente saliente de los EE.UU. ha sido Nobel de la Paz. También ha sido el presidente que más años ha estado en guerra. Esto hace un buen titular, pero tergiversa la verdad: no todo lo que pasa en una legislatura (o dos) es responsabilidad del jefe de Estado, incluyendo las guerras. Por la misma razón, creo que los analistas están dando excesiva importancia a la victoria de Trump.
Para el contribuyente medio es muy duro sentirse cómodo con el sector bancario en su conjunto, en particular cuando un rescate sale de sus ahorros. Siempre que hablo con alguien externo al sector financiero entiendo perfectamente sus argumentos: ¿Por qué cuándo ganan dinero es para ellos, y cuando lo pierden lo pagamos todos?
Antes de que se enciendan los ánimos de los aficionados de cualquier color, una salvedad: Hay que buscar mucho para encontrar a alguien que sepa de fútbol menos que yo. Dicho lo cual, hay una cosa que sí sé: Si los resultados estuvieran claros nuestros bolsillos estarían llenos, y no los de las casas de apuestas. Concédanme eso.
Por alguna razón cuanto más nos repiten una frase más cierta nos parece, en particular si la repiten personas distintas y sobre todo si alguna de ellas es una figura de autoridad o un “experto” (término escurridizo). En realidad no es así, cuando hablamos de hechos la verdad es la verdad aunque sólo la defienda una persona entre mil, o quizá ninguna.
Todos los periodistas saben muy bien que las malas noticias venden, y que menos gente estaría leyendo esto ahora si lo hubiera titulado “Tranquilo, todo va bien”. Nos alerta el peligro porque somos criaturas de emoción, lejos de ser tan racionales como nos gustaría pensar, y nos dicen que esas emociones explican buena parte del movimiento de los mercados. ¿Pero realmente es así?
Como el futuro no lo sabe nadie, mejor que hacer estimaciones, nosotros preferimos irnos a los datos. ¿Hay empresas que podamos comprar? Creemos que sí. Historícamente, después de caídas como las que acabamos de vivir, sobretodo si se producen en el primer trimestre, es muy complicado volverlas a repetir tres veces más.
Hace algún tiempo recomendábamos de manera general evitar la Renta Fija. Considerábamos ilógico hacer inversiones a rentabilidades cero o negativas. Pero tras el inevitable pinchazo de la burbuja, fuimos claros recomendando comprar, aunque con perspectiva cortoplacista.
Respecto a la deflación: Es uno de los dos motivos que están llevando las tires a terreno negativo claro. ¿Es suficiente para justificar la compra de bonos? En nuestra opinión no.
En el primer post sobre el tema hablamos de cómo evitar que una posible subida del petróleo nos afecte el año que viene cuando pongamos gasolina. En este vamos a dar un enfoque más amplio: Cómo aprovechar una posible subida del petróleo.
Dado que no es sostenible que el Western Texas siga a 55$ mucho más tiempo (hay demasiados intereses dañados ya) quería mandar dos posts para aprovecharlo con poco riesgo.