Todos conocemos la historia de Nueva Rumasa; ya sabemos que hace unos meses lanzó unos pagarés, anunciados en bombo y platillo en todos los medios de comunicación generalistas, de forma que se han colocado entre 5.000 inversores.
Los foros financieros y los comentarios de las noticias están hoy cargaditos hasta arriba del “ahora vendrán a reclamar cuando todos sabíamos….”. Y esta afirmación es CASI cierta. Es cierto que todos podíamos intuir lo que iba a ocurrir; de hecho hubo muchos comentarios y algún hilo en los foros acerca de la citada inversión y está claro que todo el mundo tenía claro lo que iba a pasar. Yo creo recordar que sólo intervine en uno, y desde luego no hice post acerca del tema. ¿Porqué?. Pues por la sencilla razón de que ni tenía, ni tengo información, aunque desde luego sospechas no faltaban.
¿Estoy sorprendido?; ¡Pues no!. Pero es que aquí, si se confirman las sospechas que todos teníamos ha pasado algo muy grave, y no sólo en referencia a la empresa. Y ahora tenemos que entender entre todos que la frase “todos sabíamos…” esconde una gran trampa.
Voy a tratar de poner un ejemplo; imaginemos que de repente nos encontramos en la televisión con mil anuncios de un producto médico que tiene unas bondades que rozan el milagro. El hecho de que un productos sea demasiado bueno para ser verdad, jamás puede ser un argumento para demostrar que es fácil, so pena de que pretendamos tirar para abajo todas las innovaciones.
Por lo tanto, puede ser que sea verdad que el medicamento sea bueno o malo. Paralelamente en medio de foros y páginas médicas empiezan a salir opiniones de todo tipo; unas personas que tratan de decir lo que piensan, otras que son de la competencia que tratan de intoxicar exagerando la información, y por supuesto otra serie de voces desde el laboratorio interesado que tratan de defenderlo todo. En todo caso, nadie sabe quién es quién en este juego, y quizás en la comunidad de esa página algunos se conocen, pero lo que está claro es que si llegamos a ese foro por el google, para buscar información puntual, sacaremos muy poco en claro.
Podemos tratar de entender si las justificaciones de unos u otros son válidas, pero para eso tenemos que entender los argumentos, tenemos que entender las noticias, tenemos que entender los datos y tenemos que tener unos ciertos conocimientos del tema. Y en todo caso podemos llegar a tener conclusiones parciales sobre un determinado tema.
Pensemos en la famosa Gripe A, que en mi caso, sospechaba desde el primer día que era una forma de hacer negocio; ¿Podía demostrarlo?, ¿Puedo demostrarlo hoy?, ¿Me arriesgaría a no vacunar a un niño pequeño?.
Cada día tomamos miles de decisiones en base a informaciones que percibimos y que no siempre son reales, y en miles de temas en los que no somos expertos. Cuando puse en un post que tenía una gripe tremenda, se montó una discusión sobre si antibióticos sí, o antibióticos no; pero la realidad es que como no tengo ni la menor idea de medicina, lo que tengo que hacer es seguir las recomendaciones del médico, confiando en que la información que reciba sea la adecuada.
Es posible que haciendo caso al médico o a la publicidad, los que no somos médicos acabemos tomando cualquier medida que tenga efectos nocivos para nuestra salud, (como al final parece que ha ocurrido con las vacunas de la gripe A); y eso a pesar de que seguro que en foros especializados y entre los médicos y profesionales sanitarios hubiese opiniones que desaconsejaban tomar esta medicina. ¿Tiene sentido que critiquemos a las personas por no haber acudido a los portales enfocados a la medicina a contrastar la opinión?.
Sé que es muy díficil entender en un foro económico que los pagarés de Nueva Rumasa eran una operación de muy alto riesgo y que los inversores se jugaban el tipo, pero el caso es que estos pagarés no se comercializaban a través de portales financieros, sino que se comercializó por televisión.
Por tanto, estoy seguro que la mayoría de los inversores que se metieron, simplemente no sabían donde se metían; basicamente porque si supiesen donde se metían, ¡no se hubiesen metido!. Sobre todo teniendo en cuenta que todo el mundo que intuía que iba a haber problemas, sabe a ciencia cierta que los inversores de pagarés de nueva rumasa, van a seguir el mismo camino que tantos inversores atrapados en tantas inversiones que no se correspondieron con la realidad mostrada por quienes los comercializaban. Por tanto, el que quisiese cobrar un 10% esperando el rescate en caso de problemas, tiene que tener claro que a estos no los va a rescatar absolutamente nadie.
Y en estas entramos en el papel de la CNMV; que ha emitido unos cuantos avisos, en los que se daba cuenta de que esta inversión no estaba supervisada por esta entidad. Siguiendo con el ejemplo médico, las comunicaciones de la CNMV, son como las comunicaciones del organismo de sanidad que proceda, y que estoy seguro que muy poca gente conoce. No tiene sentido contrarrestar una información publicitada en la televisión, con unas circulares de la CNMV.
En todo caso, estamos asumiendo que la CNMV avisó de los problemas de Nueva Rumasa, y eso es lo que parece sugerir Elena Salgado, cuando dice que el gobierno avisó e hizo todo lo que pudo. Pero debemos recordar que la CNMV avisó de que no miraba, no de que la inversión tuviese problemas. El matiz es importante, porque puede parecer que si la CNMV actua la inversión es más segura que si no actua, y la realidad es que la CNMV no valora ningún tipo de inversiones, sino que nos dice si están canalizadas a través de mercados cotizados.
De hecho, la CNMV ha dado su bendición a las cuentas de muchas empresas y a unas cuentas emisiones que son simplemente demenciales; poniendo un ejemplo muy cercano, la CNMV ha dado el visto bueno a un requerimiento a Zinkia que es simplemente demencial; por no hablar de que no ha dicho ni mu a la emisión de obligaciones que esta entidad lanzó, con un informe de Intermoney completamente absurdo.
Ahora mismo, lo que tenemos es que previsiblemente 5.000 inversores van a tener problemas, y de alguna forma, estas personas se enterarán ahora que el gobierno avisó de lo que venía encima. Pero curiosamente, a día de hoy no sabemos si esto era una estafa, si es un esquema ponzi o lo que sea. Por tanto, si el gobierno dice: ¡avisamos!; me gustaría hacer dos preguntas:
La primera es ¿de que?. Y la segunda pregunta es más grave; si el gobierno sabía que no se iban a cobrar estos pagarés, si el gobierno sabía que los fondos obtenidos no se estaban usando para lo que se decía en la publicidad y si el gobierno intuía que los inversores iban a ser engañados y quedarse sin dinero; ¿Cómo es posible que dejase que esta compañía anunciase estos pagarés en la televisión y que captase inversores sin mayores problemas?.
¿Es que el gobierno tiene que esperar a que los intentos de estafa se consumen?. El gobierno tiene que detectar e intervenir en estas estafas antes de que se realicen. Toda estafa es responsabilidad de las personas que tienen entre sus funciones evitarlas. Se puede entender que no se eviten las que no se puedan preveer; pero lo que no tiene sentido alguno es que estos problemas nos los encontremos en casos que son tan claros, y mucho menos que el “lo avisé” sirva para descargar las responsabilidades del gobierno. Si lo sabían tenían que evitarlo y punto.
Por que la tarea de un gobierno es que la información que llegue a los usuarios sea la correcta, y desde luego no se puede descartar esto en aquello de “el que invirtió no miró”, porque vuelvo a repetir, es muy fácil decir esto en un foro económico, pero la inmensa mayoría de la sociedad no sabe lo que es rankia y desde luego es algo normal.
Tampoco tengo yo ni idea de páginas especializadas en medicina y espero que nadie me crucifique por ello; espero que nadie me eche en cara que me fie de la publicidad y de los prescriptores médicos. Y sobre todo teniendo en cuenta que analizar las inversiones y donde metemos el dinero es algo importante, pero yo creo que es más importante lo del tema de la salud.