Re: Encuesta Margrave: ¿Cuánto dinero necesitas para vivir sin trabajar, y ser feliz?
Ya, lo que ocurre es que la pregunta que hace Mar en el título de este hilo yo no la entiendo como "conformarse con", sino con tener las necesidades básicas cubiertas y a partir de ahí determinar una cifra con la que poder vivir sin trabajar, algo que desde mi punto de vista y desde mi experiencia, no tiene por qué dar la felicidad.
Me intentaré explicar. Obviamente todos queremos recuperar nuestras inversiones, por lo menos contar con eso, luego ya de intereses (pluses) o de comisiones bancarias, durante este tiempo que hemos estado esperando a recuperar, nos olvidamos. Vale, hasta ahí todos de acuerdo, supongo.
Pero ¿qué ocurre en los casos en los que sabes de antemano con total seguridad que NO vas a poder recuperar tus inversiones en lo que te quede de vida? ¿Estarías abocado a tener que dejar de ser feliz de por vida? ¿Una ruina económica tiene que llevar consigo la depresión psicológica vitalicia? ¿El arruinado tiene que dejar de sonreír ya para siempre?
Es a este punto dónde mi alma se revela, también mi cuerpo. No podemos tolerar ni consentir que el dinero nos haga tan esclavos, nos condicione tantísimo teniendo como consecuencia que su falta o la disminución evidente de nuestro patrimonio nos amargue la vida. ¿En qué nos convertiríamos entonces?
¿Con qué me conformaría yo? Probablemente con que los culpables penaran por su culpa, como los responsables, con o sin conocimiento, pagamos por la presunta responsabilidad de haber firmado negro sobre blanco.
¿Cuándo empezaré a ser plenamente feliz? Bueno, metafísica aparte, no creo que en este mundo se pueda ser plena y absolutamente feliz, ni con ni sin dinero, podría ser parcialmente feliz si algun día llegara a olvidar la afrenta. Para perdonarla tendría que volver a nacer y eso lo veo más que difícil, jejeje. Pero espero algun día poder pasar al lado de una oficina del Stafander sin sentir náuseas, porque ese día habré superado el trauma.
Hasta entonces, me contentaré con intentar aparcar el tema, algo cuasi imposible, porque cada caso de estafa que lees, rememora lo que has vivido: Hoy, sin ir más lejos, nada más abrir el ordenador ya me he encontrado con el caso de otro conocido, cuyos suegros han sido engañados presuntamente por otra entidad bancaria, deuda subordinada que pierde pasta y cuando les ha hecho falta el dinero, préstamo... y todos y cada uno de estos casos vuelven a reabrir la herida. Te solidarizas e inevitablemente sientes empatía con su sufrimiento.
Pero bueno, por intentarlo que no quede.
¡Arriba esa Buckler... o lo que se tercie!
Un saludo cordial
Si un amigo es de verdad, su amistad perdura en el tiempo y con la distancia.