Por una parte $Sacyr ha elevado las reclamaciones por la ampliación del Canal de Panamá a unos 3.230 millones de euros por los retrasos y sobrecostes registrados durante la construcción de esta obra, cifra que supera los 2.870 millones de euros (al cambio actual) por los que en 2009 se adjudicaron la obra.
De esta manera, el coste total de la construcción sobrepasará los 4.485 millones de euros. El proyecto alcanza un grado de ejecución del 98% y se acaba de anunciar que la inauguración se realizará el próximo 26 de junio.
Del total de reclamaciones realizadas por los contratistas se han resuelto reclamos por un importe de 448 millones aproximadamente (de los cuales la mitad se han resuelto a favor de Sacyr). Está previsto que en las próximas fechas se resuelvan más reclamaciones por un importe de entre 179 y 269 millones.
Manuel Manrique, presidente de Sacyr, confía en que el consorcio constructor liderado por Sacyr no será penalizado por las demoras que ha registrado el proyecto.
Por otra, Sacyr ha superado a Impregilo en la puja final para construir la autopista Roma-Latina, por lo que está a punto de adjudicarse uno de los proyectos del año.
La obra está valorada en 2.728 millones de euros y Sacyr, a través de su filial SIS, ha recibido la mayor puntuación por parte de la sociedad concesionaria Autrostrada del Lazio.
La resolución se conocerá cuando se analicen las condiciones de financiación planteadas por SIS y por el otro finalista, la constructora italiana Salini Impregilo. El plazo para construir el proyecto será de 5 años y medio.
Este contrato supondría un gran impulso para la constructora española, justo cuando prevé concluir las obras de la ampliación del Canal de Panamá, ya que Italia es uno de los países estratégicos para Sacyr. También está presente en otros contratos como la construcción de la autopista DG48 Salermo-Reggio Calabria, la autopista Pedemontana-Veneta y el desdoblamiento de la línea ferroviaria entre Palermo y el Aeropuerto de Punta Raisi.