Buenas tardes.
Los trastornos monetarios potenciales por la invasión de Ucrania comienzan a afectar a la banca
Los países occidentales con intercambios financieros y comerciales con Rusia y Ucrania han comenzado a sufrir “disrupciones” importantes en sus cadenas de suministros, y aquellos que han apostado a la deuda en rublos recogen las primeras consecuencias. El FMI tiene previsto este año el desarrollo de su Programa de Evaluación Financiera (PEF) que estudiará a un grupo de países que incluyen a México y Turquía. Esto es particularmente significativo para el BBVA, cuyos beneficio atribuido para 2021 es en total de 5.069 millones de euros de los cuales 1.581 corresponden a España, 2.568 a México y 740 a Turquía.
Como no podía ser de otra forma, las tensiones internacionales tendrán efecto sobre los mercados de divisas. El anunciado incremento de los intereses por la Reserva Federal a finales de este mes ya ha logrado una apreciación del dólar frente al euro.
El Fondo Monetario Internacional (FMI), que ya ha hecho una valoración preliminar de los costes de la ocupación militar de Ucrania por Rusia -no respecto del precio en vidas del ataque- por la destrucción de infraestructuras vitales, anunció que el país ya ha pedido un anticipo de 1.400 millones de dólares bajo el acuerdo de Instrumentos de Financiación Rápida. El FMI tiene previsto este año, además, el desarrollo de su Programa de Evaluación Financiera (PEF), que estudiará a un grupo de países que incluyen a México y Turquía.
Esto es particularmente significativo para el grupo bancario BBVA, cuyos beneficio atribuido para 2021 es en total de 5.069 millones de euros de los cuales 1.581 corresponden a España, 2.568 a México y 740 a Turquía. En este último país, severamente expuesto a una política monetaria errática, la sistemática devaluación de la lira ha provocado estragos.
Efectos en España
Por añadidura ha creado un cuadro de endeudamiento de las empresas en divisas difícil de soportar. En el otoño pasado, la lira perdió cerca del 50% de su valor frente al dólar, mientras que el presidente del país, Recep Tayyip Erdogan, volvió a insistir en diciembre pasado en sus teorías económicas según las cuales bajos tipos de interés reducirán la inflación, y aumentarán el empleo, las exportaciones y atraerán inversiones. (
https://www.ft.com/content/4a7303dc-9bf6-4a70-8078-13f98edc30b4)
Esta visión, cuando menos oportunista, ha sumido a la población en una carestía extrema con una inflación anual cercana al 30%. El problema de fondo es que Erdogan mantiene un control personal sobre el banco central y se ha dedicado a depurar a los gobernadores cada vez que estos elevaban los tipos de interés. La situación ha llegado a ser tan extrema que a finales de 2021 el Gobierno dijo que compensaría a los depositantes en liras si seguía la devaluación.
Quizá inducidos por este cuadro general, los 'mentideros' financieros sugieren que el BBVA podría optar por desprenderse de su banco en Turquía, el Garanti, de cuyo capital posee el 100%. La pregunta que se hacen los observadores es si la apuesta por el banco turco tiene sentido en el presente contexto.
Habrá que observar la evolución de ese negocio, entre otras cosas para verificar el grado de certeza de esos rumores. Mientras tanto los 'mentideros' también arguyen que las relaciones entre el presidente Carlos Torres y su consejero delegado son tensas. Otro extremo sin verificar porque ninguna fuente está dispuesta a dar la cara por esas suposiciones.
El consejero delegado, Onur Genç, de nacionalidad turca, ascendió a la cumbre del banco sobre las espaldas de la necesidad de una gestión afinada del Garanti. Su destino por tanto está atado a la supervivencia de la inversión en Turquía. El BBVA ha cometido errores de bulto, como la adquisición de su banco en Estados Unidos, en el cual se hartó de hacer pérdidas hasta que lo vendió. El año pasado la entidad se anotó por fin una plusvalía a expensas de ese banco: 570 millones de euros brutos.
México, la otra pata
Mientras tanto quien sí realmente aporta recursos significativos al banco, un beneficio atribuido de 2.568 millones de euros el año pasado, es la operación en México. Si se compara con el beneficio atribuido en España, de 1.581 millones de euros para el 2021, se podría afirmar que el grupo bancario realmente gravita sobre el eje mexicano.
“La segunda economía más importante de América Latina esta estrechamente integrada con el comercio y las finanzas mundiales. Se beneficia de grandes “buffers” en el sistema bancario. El PEF se hará en medio de riesgos crecientes de las disrupciones continuadas por la pandemia y la posibilidad de un fuerte endurecimiento de las condiciones financieras globales o volatilidad de los flujos de capitales. La evaluación examinará la resiliencia del sector financiero incluida la resistencia a los choques de liquidez, supervisión del sector financiero y gestión de crisis”, señala el FMI, entre otras cosas.
El coste de la diversificación internacional no está exento de riesgos. El Banco Santander con un margen de intereses de 33.370 millones de euros tiene ingresos netos por comisiones de 10.502 millones de euros. Es decir equivalentes a una tercera parte del margen de intereses, lo que es revelador de los bajos tipos de interés en las economías desarrolladas. El margen de intereses en Brasil es de 7.875 millones de euros contra comisiones netas de 2.728 millones de euros.
Pero mientras tanto el beneficio atribuido en Brasil es de 2.325 millones de euros, el de Estados Unidos fue de 2.326 millones de euros. Comparado con el beneficio de España, de 957 millones de euros, se ve como la diversificación internacional, con excepción del riesgo de cambio que representa una fuente de ingresos tan importante como Brasil, opera en este banco.
El beneficio atribuido en Reino Unido es de 1.570 millones de euros y el de Europa 2.978 millones de euros, aunque el banco no especifica si esa cifra incluye o no a España. Habrá que seguir el recorrido de la economía de Brasil, súbitamente beneficiada por la guerra en Ucrania por el incremento del precio de las materias primas, aunque expuesta al proceso inflacionario. Como sucede al resto de monedas afectadas por la superinflación, el real puede jugar una mala pasada al Santander.
Un saludo!